Mi pequeña (Terminada).

~11~

No he podido pegar el ojo en toda la noche, me siento presionada. El señor Oh, no quiere que deje de ser su secretaria, suho todos los días me escribe para recordarme que en menos de una semana se llevará a cado su boda y no quiero ni recordar al pesadito de Alejandro.
Tomo una ducha rápida y me coloco algo de ropa que le he pedido al chófer del señor Oh que recogiera de mi habitación en el hotel. Bajo las escaleras y encuentro al señor Oh sentado en la mesa de la cocina con el periódico en la mano y un café en la otra.
--buenos días -dice al verme entrar-
--buenos días
--veo que ya te encuentras mejor para ir a trabajar
--si, ya me siento mucho mejor. Creo que quedarme un día más en el hospital me hizo mejorar más rápido.
El asiente con la cabeza mientras se lleva la taza de café a la boca. Estoy apunto de salir de la cocina cuando la ama de llaves entra.
--buenos días señorita
--buenos días
--siéntese al lado del señor, en un minuto la atenderé.
Rápidamente niego con la cabeza y veo que los labios del señor Oh se curvean formando una pequeña sonrisa.
--muchas gracias pero tengo que ir a trabajar yo…
---claro que tienes que ir a trabajar pero aún no es la hora y tampoco sabes a qué lugar – dice el señor Oh dejando el periódico en la mesa-
--¿Perdón?
--me acompañaras a una reunió que se llevará acabo en la empresa central del señor kim. Así que póngase hermosa para esta tarde.
--pero…
--no hay ningún pero señorita soo. Recuerde que soy el jefe.
Da un último sorbo a su taza de café y sale de la cocina déjame tan furiosa por su abuso de poder.
  Termino de colocarme el vestido negro que me regaló mi hermana en mi cumpleaños recuerdo haberme enamorado de él desde que lo ví en el maniquí. Me encanta como se ve mi espalda descubierta y mis piernas al salir del corte de la falda. Recojo en un moño y me maquillo un poco. No tengo ni idea de que haré yo allí pero el señor yo soy el jefe me quiere ahí.
Estoy dándome los últimos arreglos cuando escucho unos leves golpes en la puerta. La ama de llaves me indica que el señor me está esperando. De mala gana tomo mi bolso y baja hasta estar junto a el. Se ve… realmente bien con traje y con esa pajarita en vez de corbata, cuando nuestras miradas se cruzan, rápidamente desvío la mía y miro hacia otro lado, me observa fijamente sin decir nada, un escalofríos recorre mi cuerpo de arriba abajo y empiezo a sentir un ardor en mis mejillas.
---nos vamos -digo camino hacia la puerta para salir-
Bajando por las escaleras hacia el coche me froto los brazos para que la piel chinita desaparezca. Retro mis manos de mi brazos para abrir la puerta cuando el señor Oh toma la delantera.
--permitirme.
Por más de media hora el chófer del señor Oh nos lleva por un camino rural. Todo a nuestro alrededor está rodeado de árboles y pequeñas cabañas.
--¿Adónde vamos? -pregunto al no reconocer nada del camino- se supone que iremos a la oficina central del señor kim ¿No?
--olvide comentarte que hubo un cambio de planes – dice el señor Oh si mirarme –el señor kim reservo una pequeña ascienda fuera de la ciudad para la reunión.
Asiento y me remuevo incómoda en el asiento. Algunos minutos más tarde atravesamos un portón inmenso, pensé que el señor Oh había dicho que era una pequeña ascienda si es así creo que nos hemos equivocado porque esta es enorme. Al bajar del coche rápidamente llegan hasta nosotros los anfitriones de la “reunión” si lo digo entre comillas porque esto parece más una fiesta.
--sehun que alegría de verte muchacho –el señor kim se acerca y lo abraza-
Sehun. En todo el tiempo que llevo trabajando en su empresa, nunca había escuchado que lo llamarán por su nombre solo había escuchado el típico señor Oh o señor. Cuando termina de abrazarlo me mira algo sorprendido.
--¿y esta preciosa señorita viene contigo sehun?
Sonrió por el algo y le ofrezco la mano cuando el la toma y me jala para abrazarme al igual que sehun.
--una gusto yo…
---si, ella viene conmigo –se apresura a decir el señor Oh-
--solo espera a que Samara se entere – dice sonriendo-
Entramos y como imaginaba, el interior es enorme y muy elegante varios mesero pasan a nuestro alrededor.
--por favor tomen asiento dónde les plazca están en su casa. Iré a buscar a Samara enseguida regreso.
Es señor Kim se va y se pierde entre algunas personas.
--pensé que era una reunión
--claro que es una reunión para festejar el aniversario de Amur
Achino los ojos y el sonríe y aprieta mi mejilla con su mano, después la suelta y sale por una puerta que está a un lateral.
--primero me traes aquí con mentiras y después me dejas sola – digo siguiéndolo a afuera-
La puerta da directo al jardín que está iluminado con pequeñas lámparas que se cargan con los rayos del sol.
--no te deje sola. No soporto este tipo de fiestas todos son tan ruidosos
Un mesero le ofrece una copa que al parecer es vino, toma dos y me entrega una a mi.
  --¿Entonces porque viniste y me trajiste contigo?
--pensé que sería divertido.
--sehun, cariño. Que gusto volver a verte querido. -dice una mujer que abre sus brazos al ver al señor Oh-
--Samara el gusto es mío
al igual que con el señor Kim se dan un abrazo.
--tu debes ser la acompañe de sehun ¿Cierto? -asiento y ella continua- por lo emocionado que estaba mi esposo se le ha olvidado preguntarte tu nombre.
--mi nombre es yoon soo  pero puede llamarme soo, señora Kim
--por favor soo no me llames señora me hace sentir vieja a mis veintinueve años, solo dime Samara.
Después de casi una hora de hablar con Samara y descubrir que el señor Oh es práctica tiro con arco  y práctica baloncesto entramos y nos sentamos en la mesa junto al señor Kim y a su esposa Samara. Cuando mientas sirven la cena escucho al señor Kim y al señor Oh bromear y reírse, ver esta faceta del señor Oh me gusta más que la laboral dónde es pura seriedad.
Durante la cena escucho que la gente murmura a nuestro alrededor y nos mira con curiosidad así que decido preguntar.
--¿Desde cuándo no ha venido a una de estas reuniones?- pregunto discretamente-
-- no lo sé un par de años ¿Por qué?
--todos lo están mirando
Se señor Oh mira a nuestro alrededor asiente y después acercándose a mi oído susurra
--te miran a ti.
¿A mí? ¿Por qué? Será porque acompaño al señor Oh. Antes de que pueda preguntar el porque se lenta de su silla y me ofrece su mano. Lo miro extrañada.
--baila conmigo
Muevo la cabeza negativamente lo cual a él le hace gracias y acercándose a mi oído susurra.
--no fue pregunta.
Me toma de la mano y me levanta de mi silla, trato  de resistirme pero me toma de la cintura y me arrastra hasta la pista.
Al llegar me toma de la cintura y yo paso mis brazos por su cuello –lo voy a admitir estoy nerviosa pero si llegara a preguntar el señor Oh lo negare- por primera vez le pongo atención a la canción es stay with me de Alex goot. Miro a mi alrededor tratando de no mirar al señor Oh a los ojos mientras la canción suena a nuestro alrededor…

“y muy en el fondo se que… Esto jamás funcionará pero podrías sentarte a mi lado, así no dolerá. Oh ¿por qué no te quedas conmigo? Ya que… eres todo lo que necesito. Esto no es amor, es claro de ver. Pero amor… quédate conmigo.”

En ese momento siento como el señor Oh recorre mi espalda descubierta con su mano y me acerca más a él.
--soo. Quédate aquí. Quédate conmigo –antes de tomar lo que dice como algo afectivo o como algo que no es, aclara – quiero que sigas trabajando para mí.
--señor yo…
--soo está vez no puedo obligaste a hacer lo que yo quiera por eso te pido que lo pienses muy bien, tampoco te pido que me respondas en este preciso momento.
El señor Oh cada vez más se acerca hasta quedar a escasos centímetros de mis labios, los mira hipnotizado su respiración aumenta y se reclamé los labios. De un momento a otro  nuestro labios se encuentra, nos fundimos en un beso que si el señor Oh no me estuviera sosteniendo daría a parar al suelo.
--como dice la canción esto no es amor… pero te necesito soo.
No pienso contestar a lo que me ha dicho así que recargo mi cabeza en su pecho, se siente tan bien, me siento protegida estando en sus brazos aún que se, que el señor Oh busca de mi algo que yo no estoy dispuesta a dar en este momento. Durante algunos minutos estamos así hasta que siento como el señor Oh trata de separarse de mi, lo miro sorprendida pero el no me mira a mi, si no a una chica de cabello rubio que se encuentra hablando con el señor kim. El señor Oh no dice nada y abandona la pista con la mirada fija en la rubia. Al ver eso siento un vacío enorme doy media vuelta y al ver los baños frente a mí me dirijo a ellos, al entrar se encuentra solos entro a el último y me tranquilizó pienso que hacer ahora, el señor Oh debe de estar con esa chica y yo… encerada en el baño esperando, pero espero ¿Que?
--¿Cuánto tiempo tiene Oh sehun que no venía a una de las fiestas del señor Kim?
Dice una voz dentro del baño.
--no lo sé 3 o 4 años creo
Dice una segunda voz más aguda que la primera.
--llego con una chica ¿Quién será?
-- hablé con Samara y dice que ella trabaja para el. Ya sabes otra muerta de hambre que debe de estar detrás de él
Al escuchar estuve a punto de abrir la puerta y arrastrarlas fuera del baño. Pero me detuve al escuchar lo que decían.
--pobrecito sehun debe de haberle dolido mucho lo que pasó .
--si lo dejo devastado y la zorra de V no tuvo compasión de el.
¿V? Que clase de nombre es ese.
--eso lo destruyó por completo, pero gracias a Dios sehun la dejo
--he escuchado que llegó hace unos días a corea.
--si trata de buscar a sehun está claro que el no la va a querer ni ver
--eso es más que claro y ahora que está recuperando de lo que pasó la hará trizas.
--eso es lo mínimo que se merece esa zorra.
Las mujeres salen del baño mientras yo me quedo pensando en todo de lo que han hablado. ¿Qué fue lo que le pasó al señor Oh? ¿Quién es V y que fue lo que le hizo?