El italiano despiadado (Completa)✔️

Capítulo 22

Editado 2023

Hola Reinasssss
¿QUÉ TAL?

Éste Capítulo va dedicado a Vania @VaniaVila5
JazminnMdz
Las quiero 😍
Gracias por leerme, nenas.

Comenten yo, si quieren que les dedique capítulos.

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Lucía Navarro

Después del jueguito empezaron a comer, me disculpé para ir al baño y cuando salgo me encuentro a todos esperando para despedirme, ya que Lorenzo dijo que me sentía mal y que quería irme a casa, cosa que no era cierto y me arrastró a la salida sin dar una explicación.

Me hizo subir a su auto y sin decir ni una mierda condujo hasta su casa y aquí estoy, entrando sobre su hombro como un saco de papas.

Es el hombre mas posesivo que conozco.

Lorenzo Lombardi

—Déjame que me lastimas ¿Quién demonios te crees para traerme a tu casa como que soy un juguete —dice golpeando mi espalda mientras camino con ella dentro de mi departamento.

—Tu dueño —digo bajándola —¿Entonces eras tú quién me escribías cartas en secreto? —pregunto metiendo mis manos en mis bolsillos.

—Se supone que si me dí el maldito trago, era porque yo lo hacía —dice agitada.

—Nunca tuviste el valor de decírmelo —reprocho tomándola con fuerzas por la cara.

—Eras demasiado imbécil y aún lo eres, además tu también sentías algo por mi —dice quitando mis manos de su cara.

—¡Cállate joder! —digo y la beso.

La beso como aun no la había besado, con tanto deseo, con mucho desespero, abrazada a mi con muchas fuerzas. Acariciando su cuerpo como si tenía años que no la tocaba.

Los recuerdos de cuando llegaba pasado de copas, la llamaba a ella una y otra vez. Las veces que le hablaba a mi mamá de ella, de su sonrisa, de su melena, de lo inteligente que era, de lo roja que se ponía cuando le hablaba.

De como ayudaba a su amiga Kathlyn en matemática e historia para que así su amiga no reprobara.  Como tomaba los restos de comida en su bandeja y la echaba en los desechos. Como se unía a las actividades ambientelales y benéficas. Como recogía su pelo con desespero en una coleta cuando estaba resolviendo un ejercicio y sentía que el calor la invadía. Y me dí cuenta de lo que sentía por ella, pero juraba que eran estupideces y que quizás era una bruja que me habia hechizado para que me fijara en ella y no en las hermosas porristas que siempre estaban a mi alrededor con sus piernas largas descubiertas.

Profundizo el beso, ella jadea y abre su boca, empiezo a recorrer su cuerpo con mis manos, ella me desabrocha la camisa con nerviosismo. Yo la cargo en mi cintura con sus piernas rodeándome. Voy a mi habitación sin dejar de besarla.
La bajo y le quito toda la prenda que lleva puesta.

Ella con desespero desabrocha mis pantalones y yo me lo saco. Beso su cuello y su oreja. Acaricia mi nuca enterrando sus uñas en mi piel.