- No parecen tener una estrategia demasiado clara. Parecen bastante centrados en el ataque. No resistirían si los sitiásemos – anotó Hanji mientras comenzaba a abrir algunos libros llenos de anotaciones – En los planos anteriores se presentan varias reformas en los edificios que has mencionado. Con lo que encontramos varias entradas que provienen del subsuelo.

- ¿De qué fecha datan dichas entradas?

- No he encontrado ninguna referencia. Pero podríamos acceder a cualquiera de ellas a través de las catacumbas accesibles de la ciudad. Si provocásemos alguna explosión lo suficientemente distractora podríamos entrar en ellas sin ser vistos.

- Distorsionar la imagen del enemigo.... - Erwin frunció el ceño mientras abría un mapa frente a ellos – Este plan presentará tres fases. Primera fase.

- Levi y yo haremos de cebo en la granja aislada dónde fue asesinada aquella mujer. Averiguando la implicación de la familia Reiss en ese suceso.

- Correcto. Fase dos. Mike, Nanaba, quiero que alertéis al enemigo para que protejan sus entradas principales. Dejad suficientes pistas para que detecten nuestra presencia.

- ¿Eso no supondrá un aumento de sus defensas? Querrán proteger su armamento.

- No tengo interés en mermar sus defensas. No ahora. No podemos arriesgarnos todavía a una batalla contra el gobierno. Ni comprometer a nuestros soldados sin tener garantía de una victoria real. A ojos del gobierno, el cuerpo de exploración seguirá su curso fuera de estas murallas. Pero quiero conocer hasta dónde alcanza su influencia sobre nuestro estado. Será peligroso si son capaces de controlar incluso a la realeza - su mano trazó un último trazo sobre el papel – Fase 3.

- Prosigue – Mike se acercó observando aquellos trazos - ¿Nos dividiremos?

- Se que conforme alertemos cada vez más de nuestra presencia y nuestra intención de incurrir en su guarida, duplicarán sus defensas.

- ¿Qué posición tomamos Hanji y yo en este plan si tenemos que servir de cebo en la granja?

- Levi – Erwin se giró hacia él con una mirada esquiva – Hace cierto tiempo os pedí a tí y a Hanji que os internarais en palacio mientras yo era el cebo. Recuerdo que tuvisteis a un soldado persiguiéndoos con sospecha. Pero terminó por desistir en su persecución.

- Tché, ¿insinúas que tenemos que-?

- Se que tenéis suficientes habilidades cómo para disuadir al enemigo. No descarto la posibilidad de que el enemigo intente atacaros. Pero llegará el momento en que comiencen a subestirmarnos. ¿Comprendes la estrategia?

- Sí..... - aquel ligero roce hacia la mano de ella continuaba existiendo, de nuevo volver a tener aquellos espectadores indeseados. Tal vez se hubiera precipitado en su propuesta, pero prefería tener miles de espectadores a que aquella mano fuese adornada por un anillo que no era colocado por él mismo -¿Qué hay de la fase 3?

- Provocaremos una distracción cuando nos cercioremos de que vuestra vigía se detiene. Quiero que Mike y Nanaba os coloquéis en estos puntos y selléis las entradas delsubsuelo. Se que sois lo suficientemente fuertes como para afrontar un asalto. Levi, quiero que selecciones a un soldado de confianza y selles las demás. Necesito que esta misión siga siendo confidencial. Confío en tu elección.

- Comprendo.

- ¿Qué hay de mí? - interrumpió Hanji – Puedo sellar la cuarta zona.

- No, Hanji – un extraño desazón se acumulaba en su pecho – Aún no te has recuperado tras el último ataque. Necesito que tu puesto en esta misión esté fuera de acción.

Decisiones y arrepentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora