Math ᯽ ꒰ sookai ꒱

11 ×

—¿Qué tal la montaña rusa?

—No nos subimos. —se queja el mayor con la boca llena— Había mucha gente esperando y Beomgyu se impacientó... Lamento decirte que tendrás que subir conmigo después. No me iré de aquí sin subirme.

—No.

—¡¿Por qué?! Será divertido.

—No es divertido vomitar.

—No vas a vomitar. —Yeonjun gira los ojos— ¡Andaa!

—¿Por qué no vas a vomitar? —exclama una tercera voz que ambos reconocen de inmediato.

Cuando se voltean, sin embargo, no ocultan la sorpresa de ver a Dohyon y Taehyun al lado de Beomgyu.

—Hola, hyungs. —saluda su hermano menor, haciéndole una seña a sus amigos para que saluden.

Taehyun y Dohyon se miran antes de hacer una incómoda reverencia cada uno.

—No era necesaria la reverencia. —ríe Soobin, aunque nota la molestia de su mejor amigo a su lado.

Los menores sonríen algo cohibidos y Dohyon suspira con fuerza. Al parecer no ha olvidado la vez que Soobin actuó grosero frente a él.

—¿Cuando vuelve Kai hyung? —pregunta en murmullos a Taehyun, agarrando su mano con fuerza e intentando pasar desapercibido en vano porque de todas formas es más alto que cualquiera de los presentes.

¿Kai hyung?

Taehyun lo mira con una ceja arqueada y no responde. Yeonjun carraspea visiblemente incómodo y mira a Soobin casi desesperado.

—¿Podemos ir ya a la montaña rusa? —ruega.

—Está bien...

El mayor casi pega un brinquito de alegría.

—Pero sólo si después vamos a la rueda de la fortuna.

—¿A la rueda de la fortuna? —pregunta confundido, pero al no recibir respuesta sólo se encoge de hombros y decide no insistir más— Bien, nos vamos. —avisa a los dongsaengs, y a decir verdad, Dohyon parece bastante aliviado de poder alejarse de ellos.

Los dos mayores se encaminan hacia la fila, que por suerte ha disminuido bastante, así que sólo tienen que esperar diez minutos hasta que al fin pueden subirse.

Una vez que Soobin está en el asiento abrochando el cinturón, es que la realidad lo golpea. Esa cosa lo iba a poner de cabeza al menos unas cuatro veces, todo a máxima velocidad. Y aunque él pueda hacer mucho esfuerzo en controlar su estómago, sólo espera que las demás personas a bordo también hagan lo mismo.

No le da tiempo de pensar nada más porque de pronto siente el hierro del que se sostenía apretando sus brazos y pecho, y sin darse cuenta el carrito se comienza a mover de una forma falsamente lenta, para después agarrar velocidad impresionante.

Durante todo el recorrido, su expresión facial no cambia ni una sola vez, completamente diferente a Yeonjun quien estaba a su lado gritando y alzando sus brazos cada que podía.

Cuando al fin se pudo bajar, casi besa el suelo. Yeonjun en cambio parece eufórico.

—¡Bien, ahora es turno de tu jueguito de nenas!

Soobin frunce el ceño, ignorándolo para caminar hacia la rueda de la fortuna un par de atracciones más allá. La fila es un poco más larga, y mientras esperan, Yeonjun no deja de dar saltitos impacientes.

—Estás actuando como Beomgyu. —se burla Soobin.

Yeonjun se sonroja, deteniéndose totalmente y sólo haciendo una mueca nerviosa.

—Iré a buscar dulces, ¿quieres algo? —cambia el tema drásticamente.

—Cualquier cosa está bien mientras no sea chocomenta, sólo no te tardes.

El mayor asiente, levantando una de las cintas divisorias de la fila para poder salir. Pronto desaparece entre la multitud y Soobin suspira, golpeando su pie contra el piso mientras aguarda por su mejor amigo.

Sin embargo, los minutos pasan rápido y ya está al frente de la fila. Aún sin Yeonjun.

—Sube, niño, que hay fila. —apremia el encargado.

—P-pero, estoy esperando a alguien.

—¿Crees que me importa? Entonces salte de la fila.

Las personas comienzan a quejarse y a Soobin se le tuerce el estómago. ¿Por qué Yeonjun no aparecía? Definitivamente no quiere hacer toda la fila de nuevo.

En ese momento, escucha una voz a su lado.

No es Yeonjun.

—¿Es este tu amigo?—pregunta impaciente el hombre emcargado, y sin esperar respuesta, empuja a Soobin y al otro chico dentro de la cabina.

Y antes de siquiera procesarlo, Huening Kai está sentado justo al frente suyo con semblante asustado.