Somos mas que amigos.

Capítulo 1.

¿Por que ocultar algo que sientes?

Es algo que siempre digo y escribo, porque es verdad.

Cuando uno esta feliz, es difícil ocultar esa felicidad que te domina por completo.

No puedes dejar de sonreír o de mostrar a través de tus actos, la emoción que corre por tu cuerpo.

Aunque eso también pasa con la tristeza; por mas que quieres sonreír o mostrar entusiasmo en algo que haces, no puedes; es como una carga que te hechas, la cual, simplemente no puedes cargar.

Pero bueno, esto solo fue la introducción, ahora:

Empecemos con esto.

Un joven peli-azul se encontraba en frente de la oficina de su abuelo, miraba con nervios aquella puerta que debía de abrir para poder hablar con el.

Era verdad, no estaba seguro; tenia demasiado miedo de el como podía reaccionar por la noticia.

––– ¿Todo bien Irumachi? ––– no hacia falta que volteara hacia atrás, sabia que la persona que le hablaba, era Clara, su mejor amiga.

––– No... Tengo miedo.

––– Pues no lo tengas, el miedo no ayuda en nada.

––– Pero Clar-

––– No Irumachi ––– levanta la voz algo enojada ––– Esto que te esta pasando, no es algo malo, es algo que te hace feliz y yo creo que tu abuelo aceptará ––– baja la mirada y sonríe de lado ––– Vamos Iruma, yo se mas que nadie que el miedo no ayuda en nada.

Fue ahí cuando Iruma entendió.

––– ¡Cla- ––– al voltear de manera desesperada, la chica ya no estaba ––– Clara... ––– susurra con tristeza.

––– ¿Iruma? ––– la voz de su abuelo se hace presente.

Al voltear con miedo, se encuentra a su abuelo mirándole directamente y abriendo la puerta.

––– Ho-hola abuelito ––– sonríe nervioso ––– ¿Puedo pasar?

El hombre sabía que algo pasaba, pues su nieto actuaba de manera muuuuuy extraña, mas que antes.

––– Claro ––– sonríe. Empieza a caminar hasta su escritorio, donde se sienta en su silla ––– ¿Que pasa?

––– Bueno... ––– cierra la puerta. Con la mirada baja, empieza a caminar, hasta llegar al sillón que se encontraba a un lado de la puerta y alejado de su abuelo, donde se sienta ––– ¿Estaría mal si saliera con alguien? ––– levanta su vista.

Okay.... Admitía que se encontraba nervioso, pero... ¡¡Esas palabras le salieron sin temor alguno!!

Fue ahí cuando Iruma sintió el verdadero terror, pues no sabía como reaccionaria el mayor.

––– ¿Pareja....? ––– el mayor estaba sorprendido, después de todo, no se esperaba que su nieto tuviera a alguien.

––– Ah... Sí, yo... Yo... ––– el menor ni podía habar, los nervios le dominaban y era algo que no podía ocultar.

––– Iruma ––– hablo serio, el menor se quedo callado ––– Acaso... ¿ya tienes pareja? ––– el nombrado asiente, él sonríe ––– No estaría mal si sales con alguien, después de todo eres joven, claro, solamente me enojaría si salieras con alguien del reino enemigo, con el cual estamos en guerra.

––– ¿En-enserio?

––– Sí, ahí si te quedaría prohibido salir con el.

––– Ya veo... ––– baja su mirada.

––– ¿Todo bien?

––– Claro... ––– sonríe ––– Muy bien ––– se levanta y mira a su abuelo.

El mayor le mira confundido, al ver como su nieto empieza a murmurar algo.

Al instante, un joven hace su aparición, en medio de la oficina.

––– Muy buenas tardes señor ––– habla aquel joven, haciendo una reverencia.

––– ¿Asmodeus...? ––– se levanta.

––– Abuelo, te presentó a mi novio, Asmodeus––– dice Iruma, poniéndose al lado derecho del joven.

––– ¿Tu novio? ––– el peli-azul asiente ––– Mucho gusto Asmodeus.

––– Mucho gusto señor ––– dice serio, pero de forma amigable.

––– Así que tu eres el novio de mi nieto... Nunca espere que alguien de mis soldados, saliera con mi nieto.

––– Fue un amor muy raro abuelo.

––– Ya veo, entonces ¿de verdad lo quieres??

––– La respuesta que yo daría es muy obvia, claramente es un sí, pero yo prefiero que vea el amor que le tengo a su nieto, con hechos ––– el mayor se queda impresionado al escuchar tales palabras ––– Cualquiera puede hacer promesas o decir algo que no siente, solamente porque tiene boca y puede decirlo, pero yo prefiero demostrar el amor que le tengo a Iruma con hechos.

–––....Iruma ––– el nombrado levanta su vista, ya que la había bajado por causa del sonrojo que tenia ––– Tienes todo mi apoyo en esta relación ––– sonríe.

Muy bien, adelantemos un poco las cosas.

Asmodeus y Iruma, se encuentran caminando por los pasillos de aquel gran castillo, en el cual vivía el peli-azul.

––– ¿Por que sigues con la mirada baja? ––– pregunta el mas alto, mirando hacia su derecha, donde se encontraba su pareja.

––– Lo siento Azz, es solo que... No me lo creo aun.

––– Me acepto, eso es algo bueno ¿no? Así ya no tendremos que fingir nada.

––– Pero, si no fingimos nada, menos tu, que eras muy obvio, gracias al cariño que siempre me mostrabas, estuviéramos en el lugar que sea ––– susurra, recordando todos aquellos momentos.

––– Ah, sí, este... Sabes que no me puedo resistir ––– voltea su cabeza hacia la izquierda, tratando que su pareja no vea el sonrojo que ahora tiene.

––– Lo se ––– suelta un pequeño suspiro ––– Muy bien, tu cuarto es aquí ––– dice parando de caminar, quedando en frente de una gran puerta de madera.

––– Entendido ––– hace una referencia ––– Buenas noches ––– sonríe.

––– Buenas noches Azz ––– dice muy feliz.

El mas alto entra a su cuarto, Iruma, al notar que ya no se encuentra, suelta un suspiro, dejando reposar su espalda en la puerta.

––– Vendrá una guerra... Y yo seré el siguiente en irme... ––– susurra con tristeza, recordando a todas aquella personas que ya no están ––– No te preocupes Clara, seguiré adelante...

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¡Hola!

Espero esta historia les guste y sea de sus agrado.

Si se preguntan si aquí es el mundo demonio o de humanos, les daré su respuesta; No lo se.

Recuerden que mis historias son raras y puedo llegar a poner cualquier cosa.

Y ¿llegaron a pensar que Asmodeus seria alguien del equipo contrario?

También recuerden que yo no me voy por lo cliché, sino que por lo raro de mi mente.

Bueno, y sin mas que decir ¡nos vemos!