Sumisión (Tóxica) - TERMINADA (corrigiendo)

Capitulo 17

-Es increíble que todo esto haya pasado, al fin marco tuvo lo que se merecía- dijo Mauricio mientras subíamos juntos las escaleras de su casa, aún no creía todo lo que había pasado.

-Si, pero estoy mal por iraia

-Hey- agarró mi cara -todo lo que hiciste fué muy valiente, y todo fué por ayudarla a ella.

-Ella no lo ve así

-Lo hará, ya verás...

-Si hubiera tenido que hacer ya sabes... Eso con marco por iraia ¿Me lo hubieras perdonado?

Se quedó callado -No sé... Me hubiese dolido mucho pero quizá en principio no, entra- dijo señalando su habitación, yo solo me encogí de hombros

-¿Qué hay de tus padres?- lo cuestioné sin pasar aún

-Pff ya sabes como son... tú siempre fuiste como de la familia así que no dirán nada

-Si... Hace como 5 o 6 años, ahora ya me verán como una desconocida ni siquiera me recordarán

-Mauricio... Hijo, necesito tu auto- habló su padre mientras subía las escaleras -Oh. No sabía que teníamos visita, ¿Y quién es esta linda señorita?

-Es...- Mauricio trata de hablar pero su padre continúa

-¿¡Por fin has cambiado a la chica estirada esa...!? ¿Cual era su nombre... eh... katle?

-Katy- lo corrije él mientras volteó a verme y ambos sonreímos
-Papá, es Scarlett

Su padre volteó a mí, abrió sus ojos de tal forma que parecía que se le saldrían

-MARTHAAA...- llamó fuerte a la madre de Mauricio -oh por dios... Pero... que guapa estás

-Gracias...- pude decir

-¿Qué pasa, Richard?- cuestionó la madre mientras subía

-Adivina quién es...- ella solo se quedó callada observándome, yo le sonreí algo nerviosa y entonces puso cara de felicidad

-Ay-por-favor si es Scarlett... Ay querida...- agarró mis hombros cálidamente, siempre me la llevé bien con esta mujer, cuando tenía problemas en casa solo venía y ella me trataba como una madre -que grande estás, y que gusto verte de nuevo en casa, recuerdo cuando venías a hacer tareas con Mauricio

-Si... viejos y buenos recuerdos, pero son eso. Viejos!- dijo Mau

-Ni tanto, Aquí donde lo escuchas no hay un solo día que no nos hable de ti- volteé a verlo algo burlona y estaba bastante nervioso, sus mejillas ruborizadas y su motacho sudoroso no pude evitar reír

-Mamá ya para, son la razón de que no traiga chicas a casa, Ven scarlett- jaló mi brazo hacía adentro de su habitación, se veía tan gracioso pero lindo cuando se enojaba, provocaba comer su cara a bocados

-Hijo no es para tanto, ¿No la invitaras a cenar?- Cuestionó ella sobre la puerta inpidiendo que él la cerrara

-Eh... Nono, hemos ido a la fería y comí suficiente, muchas gracias y es un gusto verlos de nuevo- Me solté de la mano de Mauricio y la abracé cálidamente e hice lo mismo con su padre, sin duda: Tan buenos como los recordaba.

*

Mauricio se tumbó en su cama boca arriba -No le hagas caso ya sabes como son de ocurrentes- me senté a su lado

-Son ocurrentes si, pero no mienten y lo que más me gusta es que tú eres igual a ellos

-¿Si?- apoyó su codo sobre la cama y puso su mano apoyando su cabeza en ella -¿Y como soy?