Capítulo XXV

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4 horas después.

Culminadas las primeras cuatro horas de clase empezó el descanso, en el cual solo estuve siguiendo al representante que me indicaba los lugares por los que pasábamos de una "buena manera". Al menos me dijo su nombre, Ryan Kurty, no es tan malo como parece, pero cuando se trata de seguir la norma él definitivamente es el perfecto para ello. Después de que terminara el descanso volvimos al salón de clase, actualmente me encuentro en clase de cocina.

- Ya quiero probar el platillo de Himeko - Escuché a uno de los estudiantes hablando con el otro.

- Sí, yo también quiero probarlo - Hablaban con entusiasmo enfermizo, como si fuese una fantasía que quieren cumplir a toda costa.

... Así que tienen una especie de idol escolar o algo así, será mejor no meterme con esa tal Himeko.

Pensé observando a la chica rubia que se encontraba rodeada tanto de chicos como de chicas. El resto de la clase me la pasé tratando de cocinar algo, sin embargo, nunca aprendí nada relacionado con la culinaria, así que no pude fabricar ningún producto comestible, además, cocinar con solo una mano lo hace más difícil.

Después de clases.

... Qué aburrido, y pensar que tendré que soportar otros 24 días sin contar los fines de semana y mañana.

- ¿En qué estás pensando? - La pregunta vino de la chica que va a mi lado, Katerei.

- Es un tormento volver a la preparatoria, especialmente después de estar tanto tiempo encerrado en una habitación -

- Pero, tú no tienes ningún problema en socializar con otras personas – Esa afirmación de Katerei probablemente se basa en el hecho de que me la pasé hablando con el delegado y con Jin.

- Ser un ser social es algo normal para los seres humanos - Aunque no lo parezca durante la preparatoria tenía un par de amigos que me ayudaban en lo que necesitaba, por eso aprendí a confiar en algunas personas, obviamente teniendo mis precauciones.

- Ya veo, ¿y qué opinas del objetivo?, la viste, ¿verdad? - Me insinúa la peliplateada mientras da un vistazo a Evilu, quien está cocinando algo, al igual que todos.

- Evilu, ¿verdad?, creo que será bastante difícil convencerla de que nos ayude - Por unos segundos tuve que desviar la mirada, pues ella posó sus ojos sobre Kate y yo.

- Opino lo mismo, tal vez tú no emanes tu energía "fanthomless", pero esa chica es muy perceptiva, después de todo, tu aspecto es muy similar al suyo -

- Ella no es la única que lo notó - Dije al recordar como algunos y algunas se me acercaban para preguntar si era familiar de Evilu.

...

Finalmente llegamos a la casa de Katerei.

... Hora de descansar.

...

"Sucumbir es el alivio del endeble y existir el martirio del fuerte"

...

Actualmente me estoy dirigiendo al templo de mi anticuado abuelo en compañía de Katerei, quien tiene su mirada perdida en los edificios ecológicos de la ciudad, los cuales poseen vegetación sembrada en sus paredes, además son gigantescos y tienen diseños similares a torres.

- ¿Qué opinas de la situación actual en la que nos encontramos? - Pregunté a Katerei sacándola de sus 'pensamientos', sí es que estaba pensando o estaba en un estado de ensoñación.

- ¿A cuál situación?, la del gobierno o en la que nos involucró nuestra respectiva familia -

- La última - Katerei enderezó ligeramente su postura y puso una expresión un tanto triste, después levantó el mentón y giró su rostro hacia la ventana nuevamente para observar los edificios.

- Pienso que fallaremos, se necesita un milagro para lograr infiltrarse al Tajo y lograr cumplir exitosamente una misión de sabotaje que incluye fanthomlesss tipo beligerancia de rango superior o peor aún, los "Cardinales". Solo somos tú y yo, aunque creo que mi padre podría intervenir si nos ve en problemas - 

Atrayendo la peculiaridad [Basura]Where stories live. Discover now