Capítulo II

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Después de estar sentados bajo la copa de un árbol, como de costumbre, Manu estaba apoyado en el árbol y en sus piernas tenia apoyada la cabeza de vía, el le acariciaba el precioso pelo castaño y mientras David estaba medio tumbado con Sara en su pecho.

-Vía- dice Sara - Se ha quedado dormida y se esta haciendo tarde...-

-Habrá que llevarla a casa no me fio después de lo que ha pasado antes- Dijo David intentando dar la razón a Sara

-Aunque, estan muy lindos así, hacen buena pareja! Voy a hacerles una foto- Dijo Sara levantándose y cogiendo su cámara instantánea para hacerles una foto.

- Oye te quería comentar una cosa - dijo David a Sara.

-¡¿Sara?! Chicos donde estamos, no me acuerdo de nada. - dijo Vía levantándose de forma brusca y con la mano en la cabeza por el mareo que tenía tras el desmayo.

- Vía estamos en el parque. - dijo Manu- vamos a mi casa que no hay nadie y estaremos más tranquilos.

Se dirigieron a casa de Manuel, que estaba a unos pasos del parque.
Entraron todos y subieron a la segunda planta, donde se hayan los dormitorios, y llevaron a Vía al cuarto de Manuel.

Ella de inmediato callo rendida como si de días sin dormir se tratase.
Manu estaba solo en casa todo el puente y decidieron hacer una " Fiesta de pijamas " Por no mover a Vía más de sitio en ese día.

-¿Que querías decirme?- dice Sara mirando a David con una pequeña sonrisa.

- Eh nada...- dice el chico con un poco de color en los pómulos

-Va, dímelo- la rubia se ríe y se pone enfrente suya.

- Bueno yo creo que me voy a subir- dice Manuel.

- Bien - dicen los dos chicos restantes al unísono haciendo que se sonrojasen.

-Por cierto!- Dice la rubia intentando cambiar de tema para que no se notará su sonrojo- Ya me he leído el libro que me recomendaste , ¡Me encanta!-

El tono de voz de Sara sonaba como el de una niña que espera impaciente e ilusionada los regalos en la noche de Reyes y eso al azabache le encantaba, podría quedarse horas viéndola con esa ilusión en esos ojos verdosos y en ese timbre de voz.

-Estaba seguro de eso, pequeña- Dijo poniendo su voz de sabio- En cuanto lo ví supe que ese libro era para ti!

Sara no pudo contener la risa las voces q lograba hacer David eran muy divertidas, pero cuando no la modulaba, era una voz preciosa y muy agradable para ella.

*Mientras en la habitación de Manuel*

Manuel se acercó a su cama, donde dormía plácidamente la morena, al chico se le iluminaron los ojos al ver a la chica, después se acostó a su lado quedándose cara a cara con Vía. Al rato la chica se despertó un poco desubicada.

- ¿Donde estoy?- dice mirando a su alrededor.

- Tranquila, estas en mi habitación- dice el pelirrojo acariciandole el pelo a Vía, a lo que ella contesta abrazandole y quedándose dormidos abrazados.

Un ruido resonó en la planta de abajo, algo pasaba. La madre de Manuel corrió hacia la habitación del niño para protegerlo, sabía que tarde o temprano vendrían a por ellos. La desesperada madre escondió al pequeño de tan solo un año lo mejor que pudo, mientras su esposo intentaba que no llegaran a por las personas que más quería en el mundo, Su mujer y su pequeño niño. Lo último que el niño escucho de su madre fue:

-"Te amo mi amor"-

A la mañana siguiente un oficial de policía encontró al niño escondido y se dispuso a llevarlo con sus tíos, pues tenían una horrible noticia.

Esos bastardos habían matado a sus padres.

Manuel se despertó de un salto, sudando de pies a cabeza aunque cuando sucedió tenía apenas un año recordaba algunas cosas y aveces soñaba con esa trágica noche...

Manuel se intentó separar de Vía, pero le fue imposible, haciendo que esta se despertará.

-¿Que pasa? - dice mirándole con preocupación y tocándole la frente. - Estas sudando, ¿estas bien?- dice incorporándose.

- Si tranquila, estoy bien es... Solo un sueño nada mas- Manu le sonríe produciendo seguridad a Vía - Ahora duermete otra vez, lo necesitas- el se incorpora y deja que Vía se apoye en su hombro haciendo que este le rodease con los brazos. Se pasaron así dos horas.

Y mientras en la planta baja, David y Sara seguían incómodos por lo sucedido hacia apenas unos minutos.

-Eh... ¿Te apetece tomar algo?- dijo David para quitarle hierro al asunto

- Vale. Deja que te ayude. - dijo Sara con incomodidad y seguridad a la vez. - De paso voy a mirar si quieren algo los tortolitos.
- Vale.
Pero cuando Sara se disponía a ir hacia arriba y salir de la cocina, una mano la coge del brazo, todo su cuerpo se paraliza en un instante y sin casi notarlo David esta a su lado, de pie, posando un dulce beso a su mejilla a lo que la chica se sonrrojo inmediatamente.
-*Ruborizada* ¿Q-que? y-yo- Tartamudeo ella.
A la par que se sentaba olvidando de lo que hiba ha hacer, justo en frente del chico.
El no sabia que deberia sentir, estaba igual de confundido, y no sabía porque le había dado un beso.
~¿Por que le he dado un beso?-se sonrojo de inmediato.

°•¿Solo amigos?•°Where stories live. Discover now