agarrados de las manos

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[Nejilee]

Lee se sentía mal, como de costumbre luego de perder la vista por completo y volverse casi dependiente en su totalidad de las personas, se sentía mal por tener que aprender muchas cosas que ya sabia otra vez, por no poder volver a entrenar y por sobre todo por tener a neji con los nervios de punta. Luego del accidente que tuvo, neji se hizo completamente cargo de él y su recuperación, si no fuera por ese chico el jamás podría sentirse capas de superar este peldaño mal colocado que le trajo el destino. Pero ahora eso era tan complicado,  tenia miedo de salir del hospital sin ver absolutamente nada.

Tenía miedo de no saber que hacer al salir del hospital, de no poder caminar sin ayuda porque ahora era solo un ser patético sin funciones buenas, tenia miedo de que neji se termine cansando de estar atrás suya cada que necesitara algo hasta que se acostumbre a su nueva vida. Tenía miedo del rumbo que su nueva vida tomaría al momento de poner un pie afuera.

Unas lágrimas rebeldes hacen un delicado camino por sus bronceadas mejillas cayendo sobre sus manos al momento de llegar a la barbilla. Lee no quería llorar por estas tonterías pero le era imposible no hacerlo, se sentía tan débil emocionalmente desde el momento en que las enfermeras le dijeron que ya le habían dado de alta y venian en camino a buscarlo. Él venía en camino a buscarlo, seguramente en el que anteriormente era su auto y que por muchas razones decidió regalar a neji alegando que ya no podría conducirlo y era verdad.

Limpia sus lágrimas casi al instante en el que escucha como abrían la puerta, inconscientemente alza la cabeza en esa dirección esperado algo, cualquier cosa que visualmente no sucedió. Suelta un bufido dolido al momento de escuchar los pasos cerca suyo pero no lograr ver nada.

-Ya firme los papeles del alta, vamos a casa.

Se escucha la tranquila voz entusiasta de neji mientras la cama se movía un poco a su costado y se siente un peso menos, lee supuso que agarro su bolso y lo coloco en su hombro antes de hacer cualquier cosa.

-Genial...

Neji se preocupo por el tono para nada feliz que lee utilizo por lo que dio varios pasos hasta estar frente a frente con su chico que se notaba triste y perdido, el realmente entendía ese sentimiento, el sentimiento de que te arrebataron todo lo que soñaste en dos segundos. Era completamente devastador.

-¿Estas bien, cariño?

Lee puede sentir los pequeños cariños que neji deja es su mejilla y se siente agradecido por eso, porque todavía puede sentir esas pequeñas cosas que alteran a su débil corazón. Dejándose acariciar, lee asiente lentamente mirando a la nada, porque no era como si pudiera mirar otra cosa.

-¿Podemos irnos? Solo....solo quiero ir a dormir.

Puede sentir unos labios sobre los suyos mientras sus mejillas y cuello eran inundados de caricias y mimos, se sentía torpe cada vez que neji lo besaba de esa formas, suave y sin nada de por medio. Pero era tan adicto a esos tipos de besos que no le importaba nada mas. Unos miseros segundos después neji se aleja de su rostro sin dejar de acariciarlo, le gustaba que neji supiera cuanto le gustaba eso.

-¿Que te sucede? Estas muy extraño y me preocupa. ¿Te sientes mal?

-No, no es nada de eso. No te preocupes mucho, es en vano.

Desganado se levanta de la cama en la que se encontraba sentado y da varios pasos al azar chocando con neji y el bolso, era tan frustrante eso que solo quería quedarse quieto y no moverse nunca mas. Estaba cansado, tan solo llevaba un mes sin poder ver y ya quería rendirse a tener su vida normal nuevamente. Lee apoya su cabeza en el suelo (luego de caerse por el choque porque ahora parecía que sin poder ver no podía mantener el equilibrio, estúpida mente) y ahí tirado siente como neji patea suavemente uno de sus costados soltando una pequeña carcajada ¿Se estaba burlando de él? Aún tirado (y medio dolido) tira una manotada que gracias a dios le dio en la pierna.

-Vamos lee, ¿Que sucede contigo?

-Siento que te agoto, en muchos sentidos. ¿Por que sigues conmigo aun sabiendo que ahora soy inútil?

Neji rueda los ojos antes de sentarse al lado del cejon y comenzar a picar sus costillas, neji entendía eso de ahora sentirse inútil y que era difícil para las personas que se vuelven ciegas pero ¿eso que tenia que ver con el amor que sentía por él?

-no seas idiota.

-¡Es verdad!

Cansado de tanta idiotez neji se levanta del suelo y consigo se lleva a lee hasta tenerlo parado a lado suyo, vuelve a tomar el bolso con las pertenencias del cejon y agarra fuertemente la mano bronceada antes de comenzar a caminar con el ceño levemente fruncido. Lee a su vez se encontraba confundido y sin palabras, por su actuar podía deducir que el pálido se encontraba algo fastidiado.

-no me importa si puedes ver o no, eso no cambia cuanto te amo y lo fuerte que eres cada segundo por al menos intentar superar este suceso horrible.

Lee caminaba torpemente detrás de su novio mientras este no soltaba su mano en ningún momento, seguro su cara ahora estaba completamente roja. Suelta un suspiro escuchando todo a su alrededor y los reclamos que neji todavía le estaba dando, lo que daría por ver su puchero enojado.

-No te enojes, es solo que...

-No te enojes nada, en serio eres tonto.

Lee se aferra al brazo de neji apoyando su cabeza en su hombro sin detener el paso, estaba tan a gusto sabiendo que neji jamás lo dejaría solo sin importar la situación que se le cruzase. Delicadamente entrelaza sus dedos junto con los de su novio y comienza a dejar caricias en el dorso de su mano.

-jamás, jamás soltaré  tu mano. Bobo.

-lo sé, ahora lo sé.

Y ahí, sin soltarse sus manos lee sabia que era capaz de seguir con su vida junto a neji. Aún si no podía ver su rostro todos los días al despertar, aún si no puede entrenar junto con su novio de nuevo, nada de eso importaba mientras neji nunca suelte su mano estaba bien, muy bien.
Finalmente lee dio el último paso fuera del hospital siendo empujado levemente por neji que todavía tenia sosteniendo su mano.

-vamos a casa.

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