NUEVA VERSIÓN PUBLICÁNDOSE. INICIO 05 / ENERO / 2023
La primavera; es considerada como la estación del renacer de la vida y la alegría.
El verano; es vinculado a la diversión y alegría.
El otoño; significa madurez y no siempre es físicamente sino ta...
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—¿Qué demonios...? —fue lo primero que Amy escuchó salir de los labios de Samantha.
La de mitad cabellos castaños no entendía lo que estaba pasando, apenas estaba observando el recibidor cuando escuchó como la puerta se abrió y al girarse para ver quién había entrado, se encontró con los rostros sorprendidos de su prima, con quien recientemente se reencontró, y Elizabeth, aquella chica tan alegre que conoció en el instituto.
Ni siquiera tuvo el tiempo suficiente para formular una sola pregunta coherente, las tres solo habían pronunciado exclamaciones de sorpresa y confusión, cuando vieron bajar por las escaleras a un joven apuesto en compañía de Samantha, aquella otra chica que recién conoció en la mañana.
Un profundo silencio se prolongó, nadie se atrevía a decir nada y la tensión cada vez se sentía peor.
—Esto... sí que es una gran coincidencia —fue lo único que se le ocurrió decir a la de ojos azules.
Era de su conocimiento el hecho de que compartiría casa con otras personas, sin embargo, aquello no le había interesado tanto como para si quiera preguntar quiénes serían. Pero, sin duda, nunca se esperó que serían ellas sus compañeras.
—Realmente no comprendo lo que está pasando aquí, pero supongo que ustedes son nuestras compañeras de casa, ¿Verdad? —preguntó el castaño con una pequeña sonrisa en sus labios, quien había optado por ser el diplomático y hablar.
—Supongo que así es... —respondió Amy, aun estando confundida.
—Pues es un placer, mi nombre es Anthony Brown y ella es mi hermana menor, Samantha —se presentó a él y a su hermana con amabilidad.
—Un gusto, Anthony, a Sam ya tuvimos el placer de conocerla en el instituto esta mañana —comentó, optando por ser quien las presentaría—. Mi nombre es Amy Rivers y ellas son, Elizabeth Clark —señaló a la de mirada ámbar, quien le ofreció una radiante sonrisa—; y Kristen Rivers, mi prima —ésta última le ofreció una pequeña sonrisa tímida, mientras sus mejillas eran adornadas por un tenue rubor.
Amy se dio cuenta de aquello, cosa que le hacía sonreír un poco.
—Encantado de conocer a las nuevas amigas de mi hermana, justo antes de bajar me estaba hablando un poco sobre ustedes, ¿Qué les parece si seguimos conociéndonos mientras cenamos? —ofreció el mayor.
La de ojos azules lo miró con curiosidad, para después mirar a la joven que se encontraba a su lado aun con el ceño ligeramente fruncido. Con diversión, se dio cuenta de las diferencias que tenían ambos hermanos, donde Samantha era seria y fría, Anthony era todo sonrisas y amigable.
—Vayamos a cenar, entonces —respondió finalmente con una pequeña sonrisa.
Anthony asintió y comenzó a liderar el camino hacia el comedor, siendo seguido por las cuatro jóvenes que murmuraban entre ellas preguntas de cómo habían llegado hasta ahí o expresando su entusiasmo por vivir todas juntas bajo el mismo techo.
