Verónica Lodge, la chica de hielo, se derrite tras la desaparición de su mejor amigo, Archie Andrews.
Este suceso une más que nunca a Verónica y a ______ Jones, quienes juntas jugarán a ser detectives e intentarán resolver el misterio del pelirrojo...
Las clases acabaron y yo no había vuelto a ver a la neoyorquina desde la hora de la comida, donde me regaló esa mirada tan diferente a todas las demás.
Los pasillos están inundados por alumnos con ganas de salir de aquella cárcel y disfrutar el fin de semana, era difícil moverse por el pasillo principal.
A lo lejos consigo divisar a Verónica hablando con Kevin, intento llegar hasta ellos pero la cosa se me complica ya que la enorme marea de gente me arrastra a sus anchas.
-¡Ronnie!-Grito desde detrás de un chico alto.
-¡Ronnie!-Ahora estoy pegada a un casillero.
-¡Ronnie!-Veronica me escucha y se aparta de Kevin mientras yo llego.
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-______...
-Hey-Saludo una vez allí- ¿Vamos a seguir con eso esta tarde?
-¿No tienes nada mejor que hacer?-Dice ella sin prestarme mucha atención.
-¿Que dices? ¿Algo como que?-Digo extrañada.
-Algo como... una cita.
-No, yo no tengo de esas-Me río de mi propia broma.
-No hace falta que sigas con esto-Cierra su casillero y se va, seguida de Kevin.
¿Que le pasa? No entiendo si he metido la pata en algo o que, pero no quiero perder lo que tenia hasta ahora con Verónica, ella es importante para mi, y quiero ayudarla, quiero encontrar a Archie.
Estuve dándole vueltas al asunto en casa, e incluso lo hablé con Jughead, no tenía ni idea de que hacer, Jug me dijo que fuera a su casa, y eso hice.
Deje mi moto donde siempre y subí al apartamento del Pembrook, pego al timbre mientras pienso en que voy a hacer o decir.
-Hola, _____ -Hermione Lodge abre la puerta con una copa de vino en la mano.
-Oh, hola señora Lodge, venía a hablar con Verónica-Digo casi tartamudeando.
-Pasa, está en su habitación-Me invita a pasar.
*Knock, Knock*
-Adelante-Se oye desde el otro lado de la puerta.
-Hola...-Digo tras abrir.
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-¿Que haces aquí? -Pregunta con un tono serio y de sorpresa.
-Quería hablar contigo, aunque tú no quieras hablar conmigo-Verónica no dijo nada- Mira, no se lo que te pasa, no sé que he hecho o que he dicho, pero sea lo que sea, lo siento, lo siento mucho.No quiero estar así contigo, quiero ayudarte, tenemos mucho por delante y no quiero arruinar lo que tengo contigo.
-______...
-No, déjame acabar.
-______
-¡Déjame acabar!
-¡No tienes que acabar!-Grita ella, yo me callo- No hace falta que acabes porque no hay ningún motivo por el que me esté comportando así, no tengo ni idea de porque me ha pasado esto, esta mañana, cuando te vi hablando con Toni..yo...no sé, me sentí mal y mi mente fue a pagarlo contigo, lo siento, ha sido una tonteria y una niñería.
-Tú...¿Estabas celosa?-Digo poniendo cara de vacile.
-¿Que dices?
-Estabas celosa.
-¿Por ti?Por favor, nunca.
Las dos reímos y Verónica me tiró del brazo para que me tumbara en la cama con ella, las dos nos quedamos en silencio mirando al techo de su habitación.
-Tengo mucha suerte de tenerte-Dice ella.
-Tengo mucha suerte de que la chica de hielo me haya abierto su corazón- Digo yo, me llevé un pequeño golpe, pero valió la pena ver como enrojecía.
