Capitulo 8

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Zack.

Estaba desesperado.

Destruía todo a mi paso...

Sabía que habia alguien pero parece que estoy ciego...

Tire las sillas,mesas todo lo que habia a mi alrededor...

Me sentía enojado por no encontrar nada...

Quería romper todo lo que estaba a mi alcance.

Hasta que a mis fosas nasales llegó un aroma bastante familiar...

El olor se me hacia bastante familiar. Olia a mentas con uvas.

No podia creerlo.

Mi luna estaba cerca podía sentirlo...

Inmediatamente me detuve.

Empece a buscar por toda la cabaña.

No encontré nada por ningún lado.

- se escapó...- susurre y pase mis manos por mi cabeza

No no y NO.

¡No la dejaré ir!

Salí corriendo de la cabaña ya destruida.

Seguí el olor que me indicaba que estaba cerca.

Me paré al darme cuenta que estaba alante mío...

Vi un gran árbol. Cuando le di la vuelta al árbol.

Me desconcerte con la escena frente a mis ojos...

Era ella... Mi Luna.

Tirada en el suelo.

No sabia que hacer. Si dejarla ahí, o irme.

Un segundo.

¿Pero que mierda estoy pensando? ¿Cómo puedo ser tan estúpido y pensar eso?

La agarré de la cintura, me di cuenta que esta débil...

- al fin te encontré...- susurre con felicidad y toque su rostro con delicadeza...

Me arrodille para cargarla.

Su cuerpo estaba lleno de rasguños, su ropa estaba vieja y gastada.

Empece a caminar con ella en brazos. Se encontraba desmayada, y yo estaba preguntándome que que le habia pasado...

¿Cómo había terminado así? ¿Porque estaba viviendo en esa cabaña?

Aunque me di cuenta que estaba en pésimas condiciones...

Pero eso cambiará hoy mismo...

(...)

Llegue a la manada y, mientras caminaba observe como las personas me miran.

Les dirigí una mirada de odio. No queria que me miraran a mi Luna.

Ellos bajaron la mirada, era obvio que no querían verme enojado.

Llegué a la mansión y empecé a subir las escaleras.

Cuando alguien me habla.

- que traes ahí hermanito?- pregunta mi hermana Adriana y me detiene

Cubrí a mi Luna.

Olvidé decir que tengo una hermana menor. Le llevo un año.

- te cuento ahorita Adri- cruce al lado de ella y seguí mi camino

Cuando llegue a la habitación la acoste sobre la cama.

Tuve un momento para observarla...

Su piel está hecha de porcelana, es demasiado delgada, tiene el cabello negro, con unos mechones verdes...

Era demasiado bella y hermosa.

¿Será ella la chica a la que mis hombres se referían?

Lo digo así porque es castaña. Y ellos habían dicho lo mismo.

Busque mi teléfono para marcar al doctor.

Empecé a llamar a su número. Inmediatamente el me respondió.

- si alpha Zack?- pregunto el por teléfono

- se encuentra ocupado doctor?-pregunte yo

- no alpha- me responde- necesita algo?

- me gustaría saber si podía venir a la mansión para una cosa...

- claro que si alpha que clase de cosa?

- usted mismo lo verá- respondí- pero necesito que venga de inmediato...

- ahí estaré pronto- luego colgué

Habían muchos doctores en la manada. Pero el doctor Diego era mi amigo de confianza, no confío mucho en las personas,  y Diego es uno de mis mejores doctores...

(...)

-Pronto estarás bien hermosa- acaricie la mejilla sonrojada de mi Luna

Todavía se encuentra dormida, cosa que ya me esta empezando a preocupar mucho...

Unos minutos despues vi entrar al doctor.

- si alpha Zack?- se acercó a mi lado- para que me llamó?

-bueno doctor... Lo llame para que usted mismo observe lo que está en mi cama

El dirigió la mirada a donde estaba mi Luna. Vi asombro y alegría en sus ojos.

- Dios mio alpha... Es su Luna?- pregunto asombrado

- bueno doctor si es mi Luna- toque su frente- la encontré hoy mismo en un estado que para mi no es normal...

Vi que sacaba su maletín.

- por lo que veo digo lo mismo que usted alpha...

(...)

- su estado es un poco crítico, tiene desnutrición muy alta, le recomiendo que cuando despierte le de unas pastillas para el dolor, y que inmediatamente coma algo

El doctor empezó a recoger sus cosas.

- bueno doctor Diego muchas gracias por estar aquí- le agradecí por todo lo que ha hecho por mi hasta ahora

- no es nada alpha puede contar conmigo en lo que sea- dicho esto se retiró de la habitación

Ahora que lo pienso.

Tengo trabajo. Pero no quiero dejar a mi Luna...

De igual forma se lo dejare a Ángel...

Me sente en una silla al lado de ella.

-¿Cómo te llamaras?- me pregunte

Toque su mano.

No me di cuenta que ya se estaba moviendo...

Rápidamente solté su mano. Vi como habria sus ojos.

Tuve unos segundos para observar sus ojos, eran unos azules demasiado claros.

Vi como observaba la habitación. Hasta que su mirada se encontró con la mía.

Se separó de mi, con una expresión seria.

- ¿!Y tu quien eres?!



Esclavo De Tus Ojos ✅ [En Edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora