Gato listo

1.8K 191 76
                                    


—¿Qué? ¿Estás loca? Llamaré a la policía.

—Deberías ser más considerada conmigo... trabajo mucho para darte las comodidades que te mereces y tú sólo me tratas como quieres... —dijo la chica mirándola fijamente.

Peridot no había comprendido al principio pero poco después comprendió que lo que estaba haciendo era decir exactamente lo que ella había dicho en la madrugada. Sin embargo no iba a creer en algo como eso tan fácilmente.

—No sé qué rayos pretendes pero espero que me digas lo que quieres y después te largues de mi casa.

—¡Diablos! No pretendo nada y no me largaré de aquí. Si te mueres ¿quién nos dará de comer? Recuerda que dijiste que trabajas para darme los lujos que me merezco así que tengo que procurar que te alivies —giró los ojos con fastidio—, estoy siendo agradecida por todas las atenciones que me has dado.

Lo que la chica estaba diciendo era tan surreal para Peridot.

Miró de nuevo el collar en su muñeca y negó.

—¿De verdad crees que voy a tragarme el cuento de que eres Lapis?

—No puedo obligarte pero tal vez ésto te ayude a creer.

Bajó de la cama y en un abrir y cerrar de ojos, con ayuda de brillo intenso, se transformó en el peludo ragdoll que estaba acostumbrada a ver deambulando por la casa.

Se quedó sin habla, aquello era completamente difícil de asimilar.

El gato trepó sobre ella y se acomodó sobre su pecho mirándola fijamente.

La rubia acarició el pelaje del mínimo para comprobar que era real. Tragó saliva y nuevamente sintió el corazón acelerado.

—Esto no es real, ¿cierto? Seguro es un mal sueño...

—No lo es... —dijo volviendo a la forma humana y quedando sobre ella.

Peridot cerró los ojos y alejó sus manos. Estaba completamente desnuda.

—No entiendo esa reacción tuya, todo el tiempo me cargas y acaricias —giró los ojos—, ¿sí sabes que básicamente estoy desnuda todo el tiempo?

Se negó a abrir los ojos aún cuando parecía tener lógica lo que ella decía.

—Sólo bájate... Te lo suplico.

—Está bien...

—Y vuelve a tu forma de gato, es más cómodo —seguía sin mirarla.

—No puedo, hoy me he excedido, ya estoy cansada así que tendré qué quedarme así.

—¡No inventes! —la encaró con una mirada incrédula. —Definitivamente ésto es lo más absurdo que alguien podría imaginarse.

—No invento. De verdad no puedo, no hasta mañana.

—Pues entonces necesito que te vistas, no puedes andar por la casa así, sin cubrirte, además... Puedes enfermarte...

La chica sonrió en la oscuridad de la habitación y se acercó nuevamente.

—Ayúdame a buscar algo para ponerme —tomó su mano.

—Solo abre esas gavetas y ponte lo que sea —dijo sonrojada.

La chica asintió y obedeció. Buscó durante algunos segundos y se puso una camiseta y unos shorts de algodón.

—No entro en mi cama...

—Tampoco entrarás en la mía...

—Sólo será hoy... No entiendo por qué estás siendo tan odiosa conmigo... ¿no se supone que soy tu princesa?  —puso aquella mirada a la que Peridot no se resistía.

—Calla, es vergonzoso que digas  eso— Respiró hondo y exhaló... —Bien... Puedes dormir conmigo... Pero sólo hoy y mañana tendrás que responder todo lo que te pregunte.

—Sí... Ya que me has visto y te he besado... Tienes derecho de saber aunque borraré tu memoria después...

—¿Qué?

—Estoy bromeando —bufó y se metió a la cama. —¿Puedes acariciar mi cabello? —pidió en voz baja.

—Creí que estabas aquí para cuidarme y ahora parece que sólo quieres que te consienta; y no lo haré mientras te veas como una persona.

—¿Por qué no?

—Porque eso lo hace gay.

—Eres lesbiana, todo lo que tú haces es gay...

—¿Tú de dónde sacas esas cosas? —dijo muy sonrojada.

—Vivo contigo, ¿no? Sé todo sobre ti...

🐈

This is right? [Lapidot]Where stories live. Discover now