La belleza de la maldad

Comenzar desde el principio
                                    

-Vaya, vaya...

Esa voz.

¿Cómo no?

-¿Pero qué ven mis ojos?

-Vaya, vaya, Ace, un placer verte después de tanto tiempo.

-Ojalá poder decir lo mismo.

-¿No me has echado de menos?

-Déjate de gilipolleces, no soy Derek, no te tengo miedo, así que sigue con lo que sea que hayas venido a hacer y apártate de mi camino, no te volveré a advertir.

Avanzo dejándole atrás, con esa cara de incredulidad que todo ser humano tiene cuando se le da de probar su propia medicina.

-Ethan.

Parece que esta chica no se da por vencida.

-¿Qué?- digo sin girarme.

Saco un cigarro y me lo coloco en los labios.

-Una pena lo de Brooke...- me susurra al oído.

Me congelo, me ha dado donde más duele, pero no le voy a dar el gusto de demostrarlo.

Sigo caminando, sin girarme, sin mirar atrás, sin darle el privilegio de la atención.

Salgo por la puerta y avanzo a la vez que intento encender el cigarro.

Me tiembla el pulso.

La rabia, la tristeza, todo se apodera de mí.

Brooke...

Los buenos recuerdos vienen a mí y los acompañan los malos.

Kath.

''Zorra'', pienso.

(++++++)

-Vamos Derek, vamos a llegar tarde a clase joder.

-Ya vale joder, déjame coger la mochila.- contesta Derek agobiado.

Corremos calle abajo en dirección al autobús.

-Como perdamos el bus te arranco la cabeza.- le digo a Derek.

-Si corres y te callas tal vez no tengas que hacerlo.

-Si me hicieras caso cuando te digo las cosas no tendríamos que correr.

El bus está parado, la gente está subiendo.

Sube la última chica.

Las puertas se cierran y comienza a avanzar.

Miro con cara de asesino a Derek mientras freno.

-Gracias.- le digo.

Me evita la mirada y musita un leve ''lo siento''.

De repente se detiene el bus de nuevo y baja una chica.

-Chicos, vamos, rápido.

Nos miramos entre nosotros ante el suceso tan inesperado que se acaba de llevar a cabo y corremos hacia el bus.

Subimos y tras pagar nos sentamos, agotados tras la carrera que acabamos de realizar.

La chica que nos ha indicado que corriéramos nos mira de forma sonriente.

-Gracias.- susurro con una sonrisa.

-De nada.- contesta ella sin dejar de sonreír.

Es guapa, tiene una sonrisa bonita, un pequeño espacio entre ambas paletas que le dan un aire de adorabilidad increíble.

Sus pómulos y su nariz resaltan debido al innumerable número de pecas que los cubren y lleva mechones de su corto y negro pelo alborotados de un lado a otro.

✨THE FIRE AROUND US✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora