4. Te extrañé mucho, lobita.

En başından başla
                                    

-¡Hermione! -gritaron Harry, Annie y Ron al unísono.

Hermione reapareció tosiendo entre el humo, con el telescopio en una mano y un ojo amoratado.

-Lo he apretado y... ¡me ha dado un puñetazo! -dijo jadeando.

-No te preocupes -la tranquilizó Ron conteniendo la risa-. Mi madre te curará. Tiene remedios para todo.

-¡Eso ahora no importa! -replicó Hermione-. Harry... ¡Oh, Harry! -Volvió a sentarse en el borde de la cama-. Cuando salimos del ministerio no sabíamos qué... No quisimos decirte nada, pero por lo que oímos decir a Lucius Malfoy acerca de la profecía... que estaba relacionada contigo y con Voldemort... Bueno, ya nos imaginamos que podía ser algo así. ¡Ostras, Harry! -Lo miró fijamente y susurró-: ¿Tienes miedo?

-No tanto como antes. Cuando la escuché por primera vez me quedé... Pero ahora es como si siempre hubiera sabido que al final tendría que enfrentarme a Voldemort.

-Cuando nos enteramos de que Dumbledore iría a recogerte en persona, imaginamos que tal vez quería contarte o enseñarte algo relacionado con la profecía
-intervino Ron, entusiasmado-. Y no nos equivocábamos mucho, ¿verdad? Dumbledore no te daría clases particulares si pensara que eres hombre muerto, no perdería el tiempo contigo. ¡Debe de creer que tienes posibilidades!

-Es verdad -coincidió Hermione-. ¿Qué piensas que quiere enseñarte, Harry? Magia defensiva muy avanzada, supongo. Poderosos contraembrujos y contramaldiciones...

Annie observó como Harry miraba a Ron y Hermione con cariño, sabía lo que el pelinegro estaba pensando. Le tomó de la mano y le dio un apretón.

...y todo tipo de sortilegios elusivos -concluyó Hermione-. Bueno, al menos tú ya te has enterado de cuál será una de las asignaturas que estudiarás este año. En cambio, Ron y yo... Me pregunto si tardarán mucho en llegar nuestros TIMOS.

-No puede faltar mucho. Ya ha pasado un mes -calculó Ron.

-Un momento -apuntó Harry al recordar otra parte de la conversación con el director del colegio-. ¡Me parece que Dumbledore dijo que las notas de nuestros TIMOS llegarían hoy!

-¿Hoy? -exclamó Hermione-. ¿Hoy? Pero ¿por qué no...? ¡Cielos, debiste decírnoslo enseguida! -Se puso en pie de un brinco y añadió-: Voy a ver si ha llegado alguna lechuza.

Ron al verse solo con ellos dos, balbuceó una excusa y salió de la habitación.

-Ellos te quieren -dijo Annie- y estarán contigo siempre.

Harry la miró- Lo sé. Lo voy comprendiendo, ¿sabes? O bueno.. entendiendo el trasfondo..

Annie rió un poco. Levantó una mano y acunando su rostro, dejó un beso en su mejilla.

-Estás más guapo que nunca, ¿sabías? -comentó Annie.

-¿Ah si? -preguntó divertido- tu también estás muy hermosa. Siempre lo has sido, de hecho. Desde que me hechizaste en la estación.

Annie rió.

-Ahora que lo pienso.. ¿qué hace Issa aquí?

Annie se mordió el labio. Era obvio que Harry se enteraría de alguna u otra forma.

-Blaise, Theo y yo fuimos hasta el orfanato. Nos mandó una carta donde decía que había mortífagos rondando por ahí.

-¿Porqué no me dijiste? -preguntó preocupado y herido.

-No quería preocuparte.. no quería que te arriesgaras a salir..

Harry suspiró.

-¿Has hablado con Sirius? -preguntó Annie.

Annie y el Misterio del PríncipeHikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin