I͓̽ P͓̽r͓̽o͓̽m͓̽i͓̽s͓̽e͓͓̽̽ T͓̽h͓̽a͓̽t͓̽ I͓̽ W͓̽i͓̽l͓̽l͓̽ F͓̽i͓̽n͓̽d͓̽ Y͓̽o͓̽u͓̽

#18 ƑÃĹĹŜ

❖ ── ✦ ── 『✙』 ── ✦ ── ❖
Frágiles intentos nos acechan ,
con sus falsas criticas nos conquistan.
Sombras que el miedo nos crea,
y con la falsa ilusión nos domina.
❖ ── ✦ ── 『✙』 ── ✦ ── ❖

Jae:

Las manos me temblaban, el corazón quería salirse de mi pecho, el miedo se habia instalado en mi aferrándose tan fuerte. Estaba entre la espada y la pared, no sabía que decisión tomar.

— ¿Entonces?, ¿tenemos un trató?..–preguntó.

Debia hacerlo, de alguna forma se que el terminará con todo. Además había olvidado que tenía aun estas esposas en mi mano, las cuales no fueron un impedimento para mi.

— No..–se asombró al igual que los demás— Esta vez el trato lo haré yo.

— Eso no depende de t.....

— ¡Cállate!...y escucha..–se molestó al decir eso— Soltaras lentamente a jinyoung y yo soltaré el arma.

— Me temo que....

— ¡Y!..–grité para continuar— Yo iré contigo y te devolveré la piedra junto con la de mi cuello.

Pareció pensarlo un poco, su mirada estaba perdida.

— Acepto..–bajo la navaja.

Bien, sinceramente pense que no lo aceptaria, pero estoy mas que seguro que trama algo.

— ¿Qué?..–dijeron.

— No puedes hacer esto youngjae..–susurro Jinyoung.

— Lo siento, debo hacerlo..–les Sonreí.

Solté el arma al mismo tiempo que soltó a jinyoung, me acerque a el y me sujetó del brazo con fuerza quitándome el colgante. No puedo creer que sea tan inútil, nuevamente dejé caer en sus manos la piedra.

— Ahora también tus amigos..–dijo reforzando el agarre.

— ¿Eh?..–los miré y vi que en la entrada aparecieron mas hombres—No, no este no era el trato.

Lo miré desesperado tratando de soltarme, esto no puede ser, otra vez me mintió. Se supone que yo debía sacar el truco que tenia, no el.

— Yo no soy un hombre de juegos jae, te dije que me las pagarías..–me acercó a el.

— ¡No!, ¡basta basta por favor!..–grite al ver como los golpeaban.

— Ya basta por favor..–suplicaban bam y jinyoung.

Mark y jaebum se pusieron sobre jinyoung y bambam para protegerlos mientras yugyeom y jackson trataban de defenderse.

— ¡Deténte papá!..–se mostró sorprendido.

— ¡Alto!..–se detuvieron, yo estaba temblando de la rabia y la impotencia de no hacer nada— Que lindo, me dijiste papá.

— Ya basta por favor, te lo suplico, deja de hacerme tanto daño, ¿que te hice?, ¿porque arruinas mi vida de esta manera?..–lloré sujetando sus brazos con fuerza.