Me arrepiento (Thorki Yaoi)

2. Revelación

Tercera persona.

Tres días habían pasado desde que Murdock le había entregado los papeles de acuerdo de divorcio, y había pasado cerca de una semana desde que se había enterado que su feliz matrimonio, no era tan feliz como el pensaba.

Aunque, ese día, con Tony a su lado, había sentido más valentía y los había firmado de inmediato, pero ahora que tenia que decirle a Thor no se sentía tan valiente.

-hoy llego tarde- habla su esposo de pronto, saliendo del baño con su barba recién recortada, su traje de un color más llamativo, diferente a su habitual negro, y un perfume demasiado fuerte para Loki.

-¿tienes una junta?- pregunta mostrando interés, aunque el fantasma del divorcio acecha su mente.

-no, bueno, si- responde rápido- voy a llegar tarde, así que dile a los chicos que no habrá noche de cine hoy.

¡Ah! La noche de cine, Loki había olvidado aquello. Cuando los niños aún eran pequeños, recuerda cómo todos los viernes después de la escuela todos se reunían en el sofá para ver alguna película, comían golosinas, reían, disfrutaban de la compañía de los demás y se dormían tarde. Incluso, a pesar de que su pequeña Hela ya tenía 18, aquella tradición seguía en pie. Bueno, lo había hecho hasta casi mes y medio...

-los niños estaban esperando esta noche... ¿No puedes cambiar la junta?- pregunta Loki acercándose, pero Thor rechaza su toque.

-no puedo, es un cliente importante- habla serio, poniéndose el reloj que Loki había dejado en su mesa unos días atrás.

-feliz aniversario- sonríe notando el regalo y Thor apenas reacciona, solo se acerca a él para besar su frente, aunque se siente un toque vacío.

-feliz aniversario- responde para salir de ahí, pero Loki le abraza por la espalda.

-¿crees que hoy podrías llegar un poco antes?- pregunta sin soltarle- hace mucho que no estamos juntos, podríamos tener una noche para nosotros... Quizás hacer el am- su frase queda a medias cuando el teléfono de Thor suena.

-Loki voy retrasado, hablamos después- habla mirando la pantalla de su teléfono. Loki no alcanza a ver de quien se trataba.

Sin más, el rubio se marcha. Loki siente asco de sí mismo al pensar en sus palabras, al pensar en que lo único que puede ofrecer a su esposo para tener su tiempo era sexo, pero aún así, no es suficiente.

Se mira en el espejo de la habitación y nota que han comenzado a salirle pequeñas arrugas en sus ojos, su cabello impecable ahora no tiene tanto brillo como antes, su figura ha cambiado un poco debido a los años y los embarazos, incluso, podría decir que hasta ha subido demasiado de peso, sus labios están resecos, sus músculos se han ido hace mucho, al igual que su cintura.

Solo encuentra una palabra para su imagen. Solo una. Y es la que más duele.

Descuido.

Comienza a pensar que quizás, si se hubiese preocupado más, si se hubiese cuidado, si aún hiciera ejercicio, si aún gastará horas en el spa... Quizás y sólo quizás... Thor no habría buscado un amante.

Ese pensamiento le ronda todo el día, desde que se despide de sus hijos, siente que no hay cosa que le distraiga de eso.

Pero como siempre, Tony es su salvador y aparece con una carta en su puerta.

-tienes una entrevista, vístete que vamos saliendo- Tony le obligó a ponerse un traje, le empujó para arreglar su cabello y se lo llevó en dirección a una editorial de un diario local.

Prácticamente, entró con el a rastras para sentarlo frente a un hombre muy serio, que además, tenía un parche en un ojo.

-Stark me dijo que estudiaste literatura- dijo luego de unos minutos en los cuales leía algo que Tony le había dado.