Del otro lado del bosque [Fanfic].

01

―Hey, Jason. ―Saludé al Juguetero, el cual se notaba algo inquieto. ―¿Sucede algo?. ―Pregunté acercandome más a él.

―Se me acabó el labial rojo ¿Acaso te queda un poco?.

―¿Tengo cara de que me pintó los labios con labial rojo?. ―Pregunté sarcástica mientras señalaba mis labios los cuales actualmente eran negros por uno de mis labiales. ―¿Para que lo necesitas?, ¿Te volverás tranvesti?. ―Pregunté en forma de broma, quería molestarle un poco.

Jason sólo chasqueo la lengua fastidiado.

―Shin me trajo una nueva muñeca pero están un poco rota. ―Me explicó mientras acomodaba su sombrero.

―¿Entonces irás a la ciudad?.

―Si.

―¿Puedo acompañarte?

―No.

―¿Porqué no?

―¿Que nunca te callas?. ―Preguntó fastidiado.

―Depende ¿Me vas a llevar o no?.

―Esta bien... Te llevaré pero te quiero callada en todo el camino. ―Me amenazó, Jason era un tipo de temer y aún más cuando amenaza.

Yo sólo sonreí victoriosa para después ver cómo Jason chasqueaba los dedos transformándose en humano.

Realmente no había mucha diferencia sólo que ahora Jason tenía un estatura "normal" claro que aún seguía siendo alto y aún tenía su ropa de emo pedófilo.

Y así fue como Jason y yo salimos por un sendero en el bosque el cual al llegar a cierta parte podía ver cómo otro sendero se juntaba con nuestro sendero.

En todo el tiempo que viví en aquella pocilga jamás había visto ese sendero capaz sólo no lo había visto, decidí mejor no preguntar nada ya que había recordado la amenaza de Jason y me dije a mi misma "¡Hey, hoy no quiero morirme a la verga!" Por lo que me quedé callada.

Seguimos caminando hasta que llegamos a una cerca, la cual tenía un agujero por el cual pasamos para llegar a la ciudad.

Caminamos, caminamos y adivinen, seguimos caminando, hasta que llegamos a un centro comercial.

Jason me dijo que me sentará en una banca que se encontraba afuera del centro, hice un puchero antes de que se fuera.

Me senté resignada en la banca mientras miraba a las personas que pasaban al frente de mi.

Vi a mujeres, hombres, ancianos pero a ningún adolescente... Hasta que logre visualizar a un chico pelirrojo, el cual pude reconocer instantáneamente.

Su nombre era Damián el cual era un demonio y medio.

Un demonio y medio ya que fue expulsado del infierno antes de volverse demonio completamente por yo no se que.

El chico mitad demonio se sento a mi lado.

―¿Te has vuelto a escapar, Mocosa?. ―Me pregunto con su tipico acento español.

―No me he escapado, he venido con Jason. ―Respondí algo agresiva.

―¿Enserio has venido con tu puto niñero?.

―¿Acaso estás celoso, cariño?

―¿Celoso, De qué?. ―Pregunto arrogante. ― Si yo te conozco desde que eras una cria.

―Oh~ Ya veo. ―Dije burlandome de él. ― No me digas que viste un futuro con ella con tus naipes. ―Exclame divertida para luego voltear a ver la cara de Damián, su cara esta todo un poema en ese momento ¡No sabía si reír o sentir lástima por él!.