「 given ✧ juric 」

#00 Escaleras y acordes.

Juyeon pov.

La clase de matemáticas siempre me daba sueño, era inevitable no recostarse sobre el pupitre y pegar una pequeña sieta, recién había despertado pero yo aún seguía con mi rostro escondido entre mis brazos. Sin animos de levantarme para el receso.
ㅡJuyeon, ¿Vamos a comprar pan? ㅡla voz de Jaehyun acompañada de una leve sacudida en mi hombro de su parte interrumpió mi "tranquilidad".  Levanté mi cabeza y lo mire con los ojos aún somnolientos y rasque mi cabeza
ㅡTengo sueño, no quiero ㅡ dije y me recargue en la silla.
ㅡ¿Qué? ㅡme dijo un poco impactadoㅡ ¿Y si jugamos baloncesto? ㅡme volvió a preguntar y movió levemente la pelota que tenía en su mano izquierda.
Lo miré, di un bostezo y empecé a pararme de mi pupitre
ㅡTomare una siesta.
ㅡ¿De nuevo?ㅡexclamó y yo solamente agarré mi maleta y empecé a caminar sin mirarlo, ignorandolo completamente, saliendo del salón de clases sin decir absolutamente nada.
Hace un tiempo yo había descubierto un lugar para tomar siestas sin que nadie te haga bromas o te regañen. Cruzando el pasillo principal y saliendo al patio. Para finalmente entrar a la cancha de básquet, donde había una puerta que te llevaba a unas escaleras que no te guían a ninguna parte, nadie sabía porqué existían.
Llegué a las escaleras y di un sonoro bostezo, subí un par de escalones y para mi sorpresa, ya había un chico ahí. Al parecer no era el único ser en esta escuela que conocía este lugar.
No sé si yo soy muy distraido, pero era la primera vez que veía a ese chico en mi vida. Él estaba durmiendo abrazando una guitarra, en ese momento no sabía si despertarlo para que me de un espacio para echarme también.
Para mi sorpresa, justo en ese momento abrió los ojos y no pude evitar soltar un sonido de exclamación. Él chico sin decir absolutamente nada se sentó sin dejar de abrazar la guitarra, lamentablemente empezó un silencio extremadamente incómodo, si pudiera contar los segundos habrá sido aproximadamente de 10. Con su brazo izquierdo dio palmaditas en el suelo de la escalera invitandome a sentarme, a lo que yo hice caso y subí las escaleras sentandome a su lado.
ㅡ¿Quién eres? ㅡdijo por fin.
ㅡMe llamo Juyeon ¿por? ㅡaún estaba muy confundido, no te pasa todos los días que te encuentras con un chico que nunca has visto en toda tu vida y que al parecer estudiaba en tu misma escuela.
No dijo nada, solo desvió su mirada hacia el frente, otra vez empezó el silencio incómodo, lo cual me desesperaba.
ㅡEn serio¿Por qué no hablas? ㅡlo miré con ojos algo molestos— tengo poca pacienciaㅡ mi voz era algo fuerte y a pesar de eso el muchacho seguía sin decirme ni pio— Sabes hablar ¿no? ¡Es irritante! ㅡno pude evitar mirar su guitarra, estaba estropeada y vaya que estaba estropeadaㅡ Las cuerdas están oxidadas ㅡla señaléㅡ Por eso se te rompió una, arreglalas. ㅡver una buena guitarra así de maltratada me irritaba muchoㅡ ¿Para qué tienes una Gibson si nisiquera sabes..? ㅡse me acercó derrepente, haciendo que nuestros rostros queden a pocos centímetros de distancia esto me desconcertó a niveles muy altos.ㅡ Qué haces.
ㅡ¿Se puede arreglar? ㅡme dijo con un tono bastante esperanzado. ㅡme aleje y él se volvió a acercarㅡ ¿Puedes?
ㅡPor supuesto. ㅡtragué salivaㅡ Y alejate un poco ¿Quieres?
ㅡ¿De verdad..? ㅡsu mirada me transmitió melancolía, de la nada.ㅡ ¿Toma poco tiempo?
ㅡSi.. supongo.
ㅡ¿Puedes ahora?
ㅡNo, ahora mismo no. ㅡpasé la mano por mi nucaㅡ Me faltan herramientas.ㅡmiré mi mochila que había dejado tirada por ahí.
ㅡAh.. ㅡel silencio incómodo había empezado nuevamente, otra vez me estaba empezando a desesperar.
Él solo seguía callado sin decir nada. Agarré mi mochila y la abrí sacando cuerdas y un alicate.
ㅡ¡Una cuerda rota no es el fin del mundo! ㅡempecé a arreglar la guitarra mientras hablabaㅡ ¡Ahora me siento mal por haberte dado esperanzas! ㅡparecía una maquina, lo estaba haciendo muy pero muy rápido.ㅡ ¡Tengo sueño por dios!
Por fín la había arreglado, soy lo máximo. El chico al cual no le había preguntado ni su nombre me aplaudió.
ㅡ¡Alegrate más, elogiame y pagame las cuerdas! ㅡel contrario solo sonrió y estiró la mano para tocar la guitarra.ㅡ Aún no. No tan rápido novato. ㅡdesvíe mi mirada hacia la guitarra y la empecé a afinar, conforme iba tocando uno que otro acorde la iba afinando. Sentía un brillo en los ojos del contrario hasta llegué a sonreir levemente.
Cuando ya por fin estaba lista, di un gran y sonoro acorde. El cual dio un largo eco. Seguido de esto, el castaño que estaba a mi lado, que aún no sabía bien su nombre, me jalo de la camiseta dejándome totalmente sacado de onda. Me miró a los ojos, lo tenía muy cerca.
ㅡEnseñame a tocaresa cosa ㅡsoltó un poco mi camisaㅡ Por favor.
Yo no sabía que hacer, me quedé totalmente helado.

"Todo empezó con ese acorde.
Sin darme cuenta, comencé a rasgar  las cuerdas de su corazón sin reparo."

ㅡPrimero tengo que afinarla.

"Fue gracias a ese encuentro, que mi mundo empezó a avanzar a maxima velocidad."