Cuando parecía que la fe se encendía en mi alma,
como una antorcha en los olímpicos,
llega una brisa que amenaza tan imponente fuego,
haciendo que de tumbos y se revuelque,
dando la impresión que poco a poco se va apagando,
poco a poco la fe se va desvaneciendo,
poco a poco todo se va acabando...
De un momento a otro el sol sale,
el viento para volviéndose una cálida brisa de verano,
atrayendo consigo calor que sólo aviva más la llama,
la fe vuelve,
el mundo cambia,
todo es relativo.
La incertidumbre persigue mi alma,
mi cuerpo no sabe que será después,
¿una lluvia que apague la llama?
¿un huracán que acabe con todo?
La fe duda,
la fe parece que se va,
pero está siempre ahí,
impulsándome a tener sueños,
expectativas,
esperanza en lo venidero.
El miedo me come,
pero el fuego dentro de mi lucha contra este,
haciendo de mi cuerpo un refugio para mis sueños.
YOU ARE READING
Poemas que no tienen que ver ninguno con el otro
PoetryGrupo de poemas escritos para aprender a perseverar; no es que los poemas sean motivaciones pero escribir tiene que motivarme, si no es el fin.