Amigas de 5 minutos

Hola, mi nombre es Yue Perséfone Carter y tengo 18 años. Lose tengo un nombre bastante extraño, pero no me pregunten por que, no se el significado, aunque mi mamá siempre me ha llamado Luna, así que supongo que me lo puso mi papá.

Vivo en España con mi familia materna en León, donde crecí y me crie, estudie en un colegio católico llamado ¿? Pues bueno no creo que sea una buena idea mencionarlo, solo diremos que es tradicionalista y he estuve por 11 años hay; mis padres se divorciaron cuando tenía 3 años y en este momento se preguntaran si solo es una descripción de mi misma pues no crean que es una memoria de una chica que simplemente quiere escribir su biografía, hay una historia que contar que sinceramente espero que no se identifiquen con ella o estarán en el mismo barco que yo.

Bueno esa supongo que es la base de lo que necesitan para que puedan sacar sus propias conclusiones de mí y de cómo es mi vida más o menos.

Mi historia en realidad comienza cuando tenía 10 años y me entro la curiosidad sobre la amistad y lo que implicaba la palabra, me acuerdo poco de como era antes de esa edad y como me relacionaba con la gente antes de eso; aunque supongo que actuaba como las demás niñas pequeñas o eso es lo que me dicen las personas a mi alrededor y sinceramente espero que sea verdad.

A esa edad era alta, siempre lo he sido, una de las más altas de mi grado, pero no la más madura y eso es algo que he descubierto por mí misma viendo a las personas a mi alrededor y al mismo tiempo tratando de adaptarme como todos los demás; jugué con muñecas hasta los 13 años (lose patético) que fue cuando mi prima Luz ya no quería jugar conmigo y ya no tenía con quien estar, pero eso solo era con la familia.

En la escuela era muy diferente tratando de equilibrar tratar de ser ruda y a la vez tratando de ser femenina y suave lo cual no era fácil, siempre estaba bajo la mirada de las profesoras que a pesar de que no me criticaban se notaba por su mirada que no me aprobaban puesto que era muy habladora y siempre trataba de dar mi opinión ¿han escuchado la canción de "Phineas y Ferb" como ser una dama? Pues yo sí y nunca pude ser así, no soy femenina y eso que me esforzado por serlo pero simplemente no estaba en mi; soy la rara, la que no encaja, la que se la pasaba cantando en clase, eso es algo que me encanta aunque mi voz no es la mejor pues desde niña me ha gustado la música, me han puesto sobrenombres simplemente porque no me interesaba en las mismas cosas que las demás (a se me olvidaba mi colegio era de mujeres), por lo que trate de construirme un caparazón para protegerme, sabía que las bromas nunca fueron mal intencionadas y que solo eran por diversión además que no todas eran así pero no signifique que no duela; estoy acostumbrada a aislarme creo que lo he hecho toda mi vida, cuando fui creciendo me di cuenta que me sentía más cómoda con niños menores que yo o con los adultos y en estos momentos pensándolo entiendo que podría ser porque cuando salía con mi papá siempre conversaba con sus amigos y al ser mi mamá profesora de inicial muchas veces convivía con pequeños, es algo que me ronda la cabeza desde hace un par de años y me pregunto si eso tuvo algo que ver con lo que me paso; pero continuando al crearme este caparazón no solo aleja las burlas sino también a las chicas que querían que me uniera a ella, aunque recuerdo algunos descansos donde me sentaba sola cerca de donde estaba la capilla a comer sola o cuando me encerraba en el baño apenas tocaba el timbre a llorar solo esperando a que sonara de nuevo para volver a clases, nunca me he sentido cómoda en multitudes y por eso si me sentaba en un grupo procuraba que fueran pequeños y también era la razón de que odiara los trabajos en grupo pues me sentía como la única que trabaja o la excluida por no poder entender sus conversaciones.

Me estoy saliendo del tema este no es un libro sobre mi vida, estamos hablando de las amistades que asemos durante nuestra infancia; una recuerda los juegos en el parque o restaurantes, juntándote con los primero niños que vez y simplemente divirtiéndote sin importante nada más, para luego despedirse y en muchos casos no volver a verlos, esos yo los llamo "amigos de 5 minutos" porque eso es lo que dura nada más y no son para nada relevantes en tu vida, después están los amigos que ases en la escuela que son un poco más cercanos pero es solo porque los ves todos los días y ya es rutina pero pocas veces es una verdadera amistad (si les soy sincera no me acuerdo haber tenido una verdadera amiga en mi primaria) normalmente solo son chicas con quien estas en recreo o ases trabajos pero que sabes que con el tiempo ellos se cambiaran de salón o escuela y esa amistad quedara en el olvido, y las que si duraron más que eso solo les puedo felicitar y esperar que sea una amistad de verdad y duradera. 

Esa tristemente no es mi historia, tenía amigas en la escuela, en el coro y el la banda, pero yo sabía que solo eran compañeras y aunque me empeñaba en hacernos cercanas entendía que solo era una conversación para distraerse, o alguien a quien pedir un favor; a quien engañaba debí entender eso hace mucho tiempo pero solo era una pequeña tratando de encontrar una amistad estable, alguien a quien pudiera decir mejor amiga pero nunca llegaba y yo me quedaba sola, aislada y simplemente con la cabeza gacha esperando a que terminaran las clases para poder regresar a casa y no tener que preocuparme por socializar y tener que poner una sonrisa falsa simplemente para que no se me quedaran mirando. Tengo los días en la escuela muy borrosos y sé que algunos eventos yo misma los bloquee, pero podían culparme lo único que quería era olvidar y me esforcé mucho para hacerlo.

Siguiendo con la primaria, recuerdo a una profesora la miss Amelle, ella me enseñaba computación y recuerdo aunque también de forma borrosa como en los recreos me iba a su salón a ayudarla simplemente para alejarme de todo, aunque a los 7 años no lo entendía del todo porque lo hacía; todo estuvo bien para mí por ese tiempo pero la profesora preocupada porque no me veía socializar con otros niños llamo a mi madre y le conto lo que sucedía mientras ella comenzó a alejarme dejándome de nuevo sola y otra vez asiéndome volver a la faceta de felicidad falsa y a la alegría inexistente.

Fue un calvario al menos lo que puedo recordar, soy una buena actriz eso creo pero también sé que nunca abrí mis sentimientos en público algo que a pesar de ser pequeña lo comprendía a la perfección, han oído la canción "libre soy" pues yo sí y hay una parte que estoy seguro que no muchos se identificaran pero fue algo que me marco:

"Lo que hay en ti, no dejes ver

Buena chica tu siempre debes ser

No has de abrir tu corazón".

Esto es algo que me asegurado de cumplir en todo momento, porque cada vez que olvidaba esa frase sufría y eso era algo que me consumía de una manera que ni yo entendía, pero aun así lo sentía y sabía que mientras más me rompiera peor seria y desencadenaría algo que ni yo quería saber que seria. Cerca del final de mi quinto año de primaria encontré un nuevo escondite uno en el cual nadie podía echarme la biblioteca, es triste que descubriera que me gustaba leer solo cuando buscaba un lugar solitario en el cual sentarme y sentirme miserable, pues si no lo crees bueno es tu problema, esta fue una solución perfecta y que a pesar de que me aislaba de todos también me daba tranquilidad; pero todo termino cuando consigo a mi primera "mejor amiga".

Ella se llamaba Verónica y me encontró un día en el recreo en la mesa de siempre en la biblioteca leyendo una pequeña historia, se sentó a mi lado y yo me la quede mirando esperando que ella hablara preguntándome que quería, Verónica tenía una mejor amiga Cecilia y ambas eran inseparables por lo que me preguntaba por qué estaba sola, al parecer se pelearon y ella no sabía con quién estar así que fue a mí, casualidad? si como no, aunque en ese momento no lo vi así y sentí que era mi oportunidad de tener una amiga verdadera, que equivocada estuve; no paso más de un mes para que ellas se reconciliaran y como lo supondrán yo no entraba en ese grupo y mis esperanzas quedaron por los suelos, la semana que le siguió fueron malas todas mis mascaras caían y no podía detenerlo por más que me esforzara hasta que un día salió la primera grieta y me encontré en un cubículo del baño llorando en el recreo, que estaba pensando o sintiendo no lo sé pero no tengo ningún deseo de recordarlo por lo que ni siquiera me pidan comentarlo.

Ese fue el inicio supongo pues comenzó un rumbo de declive, me podías ver en el salón sonriendo, hablando con los maestros, conversando con mis compañeras y si me veías todo te parecería de lo más normal pero al menos una vez a la semana me podías encontrar en el baño llorando y simplemente tratando de soportar otro día mas contando cuanto faltaba para terminar el día y volver a mi casa donde estaba sola, donde podía bajar mi mascara aunque sea mínimamente porque sabía que nadie miraría más profundo, porque sabía que simplemente podía esconderme en la oscuridad y comprendía que mi miseria era algo con lo que tenía que enfrentar y que yo nací para estar sola; han pasado 8 años desde que tuve esa realización y aunque he tenido altas y bajas mi predicción se cumplió estoy sola y no creo que eso nunca cambie.

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Este es solo el comienzo de mi historia, pronto continuare pero  no lo are muy largo, espero que les halla gustado.