Teresa.

91 6 0
                                    

Querida Teresa,

me gustaría pedirte perdón.


Nos faltó pasión de madrugada en la cama

y nos sobró el café de por la mañana.

Aún no consigo dar con la explicación

de cómo la monotonía puede hacerse dueña

de una noche de ardor, beso y sudor.

Quiero pensar que nos pilló mal tiempo,

que, simplemente, no era nuestro momento.

Pero volveré a intentarlo en invierno,

porque, créeme cuando te digo,

que desde el momento en que te vi

supe que podría enamorarme de ti.


Tu perenne vestido largo me gustó tanto

que no quise acercarme por miedo a mancharlo.

Mas, lo haré caer con las hojas de otoño,

para poder así finalmente descubrir

todas tus curvas, calles y esquinas.

Para acabar acariciando aguas

a la orilla de tu río mientas 

nos come la puesta de sol.


Es cuestión de tiempo.

Siempre se ha tratado de eso.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 22, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Esencias.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora