Estoy con la cabeza en el inodoro mientras controlo un poco el vómito. Limpio mis labios y respiro lentamente. Me levanto del suelo y me miro en el espejo para contemplar mi demacrado rostro. Abro el grifo y lavo mi cara. Salí del baño y una bola de pelos pequeña entró a la habitación.
— Quien eres pequeño? —lo tomé en brazos y luego entró el
—Se llama Yeontan y es nuestra mascota. Te gusta?
— Es hermoso y muy tierno —no quitaba mi mirada del cachorro y luego miré con mucho amor a mi chico — Gracias