Capítulo 10: Te amo.

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Altagracia POV

Ese beso lo necesitaba tanto, sentí que de nuevo me llevó al cielo. Estaba muy concentrada en este maravilloso momento que no pensaba bien las cosas.
El beso fue subiendo de nivel, sentí como Saúl quitaba el nudo de mi nata y ahí fue cuando recobré el sentido...

Altagracia: Esto no está bien, es mejor que te vallas.- Tenía la respiración muy agitada.

Saúl: No me puedes pedir eso, necesito estar contigo, aquí a tu lado con nuestro hijo.

Altagracia: ¡No! No quiero y no puedo, mejor vete con tu noviesita esa y a mi déjame en paz.

Saúl: Pero, ¿no lo entiendes? Yo te amo y ahora más que nunca debemos estar juntos.

Altagracia: Pero ahora lo que tú no entiendes es que no puedo estar con un hombre que desconfía de mi y que cree en lo que le dicen las demás personas en vez de la mujer que supuestamente ama.- Hice notar la ironía en mi voz.

Saúl: Por favor discúlpame, no fue fácil para mí, por un lado estaba el hombre que me dio la vida y por otro la mujer de mi vida. Debes de comprenderme.

Altagracia: No lo sé, tengo muchas cosas que pensar. Mejor vete.

Saúl: ¿Eso quiere decir que vas a pensar en si debemos regresar?

Altagracia: ¡Eso quiere decir que estoy harta de esta situación! ¡Ya vete de una vez por todas!

Saúl: Está bien pero esto no termina aquí. Volveré todos los días a verte y a ver el avance de nuestro bebé.- Antes de irse se acercó a mi y dejó un beso en mis labios.

Altagracia: ¡Quítate y vete ya!- Salió con una sonrisa de oreja a oreja el muy cínico.
Soy una estúpida por haberme dejado llevar por ese beso, no puedo caer tan fácil en la tentación pero lo amo y no puedo hacer nada ante eso.
Regreso a la cama y me recuesto de nuevo, no sé qué hacer, no sé si debo regresar con él, ¡simplemente no lo sé! Mi mente me dice una cosa muy distinta a mi corazón. Además debo pensar en mi pequeña, ella debe tener una estabilidad, no quiero que ella pague por los errores de sus padres, quiero una vida distinta para ella.
Comenzaron a pesarme los ojos y no supe más de mí.

Saúl POV

La verdad me siento entre la espada y la pared, no sé qué decirle a Elena, mientras que a Altagracia le pedí que intentaramos de nuevo nuestra relación, por el momento llegaré a casa y pasará todo normal, pero tendré que hablar con Elena sobre esto, no puedo mentirle a ella y mucho menos a Altagracia.
Pocos minutos después llegué a casa, Elena estaba dormida cuando entré, me acosté a su lado y me quedé profundamente dormido.

...

Un sonido hace que despierte, abro los ojos y es mi despertador. Me levanto y veo que Elena sigue durmiendo, entro al baño sin hacer ruido y decido bañarme. Minutos después salgo y veo a Elena sentada a la orilla de la cama.

Saúl: Buenos días.

Elena: Buenos días mi amor, no te sentí llegar. Me quedé profundamente dormida, ¿A qué hora llegaste?

Saúl: No revisé la hora pero sí era algo tarde.

Elena: Bueno arreglarte que tienes que ir hoy a la Fundación.

Saúl: Sí, hoy hay mucho que hacer.- Me dispuse a cambiarme y al terminar fui al comedor a desayunar con Elena, me sentía un poco mal por mentirle, sé que esto no es justo para ella pero aun no es tiempo para decírselo. Termino de desayunar y salgo de casa llendo a la Fundación.
Al llegar lo primero que hago es ir a conversar con las recién llegadas sobre sus casos. Las horas pasaron y terminé un poco tarde.
Decidí en ir de nuevo a casa de Altagracia a revisar que ella y el bebé estén bien. Cuando llegué toqué la puerta y enseguida me abrieron, me indicaron que Altagracia estaba en su habitación con su hermana así que subí y toqué.

Contigo En La DistanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora