capitulo 4

126 4 0
                                    

- El Sr. Williams nos dio ésta dirección, para continuar con nuestro trabajo. – Dijo James. 

- Si, ya me explicó todo.- Dijo sentándose en el sofá. – Siéntense por favor. – Dijo apuntando unos sillones. – Mi nombre es Anahi Jones. Como los Henderson viven en la cuidad donde están más propensos a sus enemigos decidieron venir a vivir a su casa de fin de semana, que es aquí a 3 cuadras. 

Mi consejo es que se queden aquí hasta que terminen su misión. Además la escuela donde va Logan queda cerca de aquí. No tendrán que ir y volver. – explicó.

- Está bien, estamos de acuerdo. – dijimos al mismo tiempo. – Pero, no tenemos nuestra ropa.

- No te preocupes, yo ya me encargué de eso. – dijo sonriendo. – les compré ropa nueva.

- No era necesario. – Dije fría. 

- Si lo era. – Dijo ella seria. – Mírate como te vistes… - Dijo examinándome. – Disculpa pero pareces una vieja de 50 años…

- QUE? – Dije molesta.

- _____ Cálmate. – dijo james tomando mi mano.

- Se esta ganando una paliza James…- Susurré.

- Bueno, pueden ir a ver sus habitaciones. – Dijo levantándose del sofá.

Nos indicó cuales eran las habitaciones para cada uno.

Entré lentamente, la habitación era de color rosado pastel y los muebles eran blancos. Había una cama Matrimonial con sabanas blancas y frazadas del mismo color que la pared, sobre ella 2 almohadones de terciopelo fucsias. Enfrente de ella había un gran espejo con tocador. Un placard lleno de vestidos y ropa de última moda. Y Un hermoso balcón con vista al vecindario.

Era demasiado para mi gusto. Estaba acostumbrada a usar siempre la misma ropa, la misma habitación gris y obscura, la misma cama antigua de hierro. No éramos pobres, solo que nunca me gusto comprar cosas o salir al Shopping, Vivía bien con lo que tenía… Era lo indispensable.

Mientras veía el placard con ropa vi un lindo vestido. Lo saqué y lo examiné, era lindo… me recordaba a mamá. Ella usaba siempre vestidos, día, noche, tarde… Pero usaba vestidos.

- Te gusta? – Preguntó desde la puerta.

- Por qué te molestas en hacer esto? – dije refiriéndome a la habitación.

- Es lo que a una chica normal le gusta, no es así? – Dijo obviamente.

- Yo no soy una chica común y corriente a la que le gustan los ponis, el maquillaje , los vestidos…

- Por que eres tan fría? – Dijo entrando.

- Tengo mis motivos. – Dije seria. – Pero tendré que conformarme con esto.

- Te parece poco? – Dijo levantando una ceja.

- No Anahi. Me parece demasiado… - Dije saliendo en busca de James.

James estaba en su habitación. Entré era realmente linda… a demás de la cama y el placard tenia un control digital para monitorear todo. Había muchas cosas tecnológicas. Una enorme pantalla plana se encontraba en frente de la cama.

- Hola – Me dijo sonriendo. – No te vi entrar… Que tal tu habitación? – preguntó.

- Esta del asco… - Dije con una mueca.

- Vamos ____ no seas tan amarga. Seguro Anahi la decoró bien bonita. – dijo Riendo.

- No, la decoró como se le dio la reverenda gana. – dije molesta.

- No seas amargada. – Dijo serio. – Ella está siendo muy dulce con nosotros… - Dijo conectando un par de cables a al computadora.

- “Ella esta siendo muy dulce con nosotros…” – Imité su voz. – Me dijo vieja. – dije cruzándome de brazos.

- Y no se equivoca… - Dijo riendo.

- JAMES! – Exclamé enojada.

- Es una broma _____. – Dijo abrasándome. 

- Suéltame… me asfixias!! – Dije entre sus brazos.

Lo ayudé a terminar de instalar el sistema de monitoreo. Luego salimos a instalar un par de cámaras por el vecindario y por fuera de la casa.

Cuando volvimos Anahi estaba sirviendo la mesa.

- Siéntese chicos, el almuerzo ya esta listo. – Dijo poniendo un par de platos en la mesa.

James y yo nos miramos con los ojos bien abiertos. Nunca comíamos en casa, y si lo hacíamos comíamos sándwiches de jamón. Nuestro trabajo no nos daba mucho tiempo.

Nos sentamos en silencio. Anahi había cocinado Carne con una especie de salsa de hierbas y papas.

- Esta delicioso. – Dijo James.

- Gracias. - dijo sonrojada.

- No tengo hambre. – Dije alejando el plato de mi.

- Pero solo has probado 2 bocados. – Dijo Anahi.

- Con permiso. – Dije levantándome de la mesa.

Subí las escaleras. Esto me estaba haciendo mal. No era que estaba feo, en realidad estaba riquísimo, sino que esto me estaba recordando a mamá. Anahi era como mi mamá reencarnada. 

Salí hasta el balcón y mire el vecindario, niños jugando, riendo, divirtiéndose… un pequeña lagrima se deslizó por mi mejilla, la cual limpié bruscamente.

- James me contó lo que les pasó. – Dijo Anahi a mi lado.

- Todo? – pregunté.

- No, pero ahora se por lo menos porque eres tan fría…

- Escucha, lo siento… Se que te trato mal pero… - me interrumpió.

- Extrañas a tu madre? – preguntó repentinamente.

- Demasiado. – Dije sollozando. 

- Se como te sientes. – Me abrasó.

Me quedé inmóvil 2 segundos. Luego me aferré a ella llorando.

- Llego en mal momento? – Preguntó James desde la puerta.

Amor Encubierto-Primera Temporada..¡¡Where stories live. Discover now