—Ahora.

Kiara miró a su padre por última vez. Se sentía tan incomprendida por todos. Soltó un pequeño grito algo irritada y se dio la vuelta, dirigiéndose a su habitación. No podía creerlo, ¡Su propia familia no la comprendía!

Kion vio cómo ésta se iba. Tragó saliva y miró a sus padres por última vez. Abrió la boca para decir algo, pero luego se arrepintió y se retiró de la habitación.

—Simba, ¿No has sido muy dura con ella?—Le preguntó a su esposo al ver que sus hijos se habían ido.

—Para nada.—Respondió cortantemente Simba.

Su esposa suspiró y miró el suelo.

♥♥♥

Kiara estaba triste, furiosa e indignada a la vez. No soportaba ver a sus padres regañandola.

Al llega es su habitación, lo primero que hizo fue tirarse a la cama y pensar.
Hasta que alguien entró sin el permiso de ella. Kiara no se molestó en ver quién era, pues estaba boca abajo en su cama.

—Zazú, si eres tú, por favor retirate. No necesito nada—Habló sin ganas pero educadamente.

El chico se sentó en su cama y la miró. Kiara aún seguía con la cara en la almohada. Al sentir a alguien sentarse allí con ella, decidió darse la vuelta.

—Sé lo que hiciste.—Habló el de piel morena—Y no me sorprende.

Kiara lo miró, algo seria. Había una tensión bastante notable en aquel ambiente.

—Kiara, podrías haber muerto.—Dijo Kovu sin pensarlo.

—¡Todos creen eso de mí!—Se sentó en la cama y lo miró enojada—No lo soporto más.

—¡No te lo digo por ser la princesa!¡Te digo que podrías haber muerto siendo princesa o no! ¿Sabes lo que es enfrentarse al clan de Janja?—Habló Kovu, un poco más alterado.

—Sí, sé lo que es—Contestó Kiara, perdiendo su postura—¿Pero sabes qué? Herí a uno y eso fue lo que acabó con todo esto.

—Estás toda lastimada.—Miró a la chica—Si te hubiera pasado algo, yo no sé qué haría.

—Eres como mi padre—Dijo mirando hacia otro lado, enojada.

El chico no respondió y se levantó. Fue a buscar una finísima tela blanca con un poco de agua y volvió a sentarse detrás de ella. Bajó un poco su vestido, no quería que nada pase entre ellos, solo quería curarla o aunque sea limpiarle las heridas.

Kiara lo dejó y el comenzó a pasar su paño frío con delicadeza por las heridas de la parte superior de la espalda.

Durante esos momentos, no se escuchó nada más que sus respiraciones. Kiara miraba fijamente a un lado mientras que el otro se encargaba de curarla.

Pasó un largo rato así. Cuando terminó, Kovu soltó el paño frío de agua, le arregló el vestido y se posicionó frente a la princesa.

—Perdóname—Dijo agarrando sus manos con delicadeza—Yo sí confío en ti. Pero me asusté mucho, ¿Sabes?

Kiara lo miró a los ojos, el chico estaba siendo sincero. Acarició las manos que agarraban las suyas y sonrió levemente.

—Bien, te entiendo—Respondió dulce.

El chico, sin pensarlo, se acercó a sus labios y le dio un tierno beso. Uno que Kiara no tardó en corresponder. La joven se acercó más a él, quería tenerlo cerca.

Kovu sonrió en el beso al notar esto y la abrazó. Nunca antes una chica lo había amado de verdad.

El beso finalizó y ambos se quedaron mirando fijamente a los ojos. Estaban tan cerca que Kovu podía sentir la respiración se su pareja.

—Te amo—Susurró entre risas.

—Yo más, mi princesa.—Dijo el otro. Le encantaba la sonrisa de la chica, se veia como un sol brillante y alegre.—¿Acaso lo has dudado?

Kiara sonrió y le dio un beso corto y dulce. Al separarse lo miró a esos ojos verdes. Esos ojos que ls volvían loca.

—Nunca, mi príncipe—Susurró y lo abrazó.

͠s͠ᴏ͠ʟ͠ᴏ ͠ᴀ ͠ᴛ͠ɪ ͠ᴛ͠ᴇ ͠ɴ͠ᴇ͠ᴄ͠ᴇ͠s͠ɪ͠ᴛ͠ᴏWhere stories live. Discover now