Por fin

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Hasta el día de hoy, el recuerdo de ese evento permaneció fresco en la mente de Shen Jiu. Resopló suavemente, burlándose de su improbable sentimentalismo. Ya no era más Shen Jiu, sino Shen Qingqiu ahora. Así como Yue Qi era ahora Yue Qingyuan, el respetable líder de la Secta Cang Qiong a la que ellos se unieron. Él mismo era el Señor Pico de la segunda cima, el Pico Qing Jing, y eso le convenía a Shen Qingqiu.

La jerarquía se basaba en los picos, no en cuando se convirtieron en discípulos de la secta, y Shen Qingqiu solo podía sentirse cómodo refiriéndose a Yue Qingyuan como su superior, así que este era el mejor arreglo. Por supuesto, no lo admitiría ante Yue Qingyuan, que se volvería tan irritantemente brillante si se enterase.

"¿Tienes algo en mente, Qingqiu?"

"... sabrías lo que es, shixiong."

Al escuchar esas palabras, los ojos de Yue Qingyuan se volvieron suaves de cariño mientras Shen Qingqiu resistió el impulso de golpearlo con su abanico.

Esto ocurría una vez al año, cuando las puertas de la Secta Cang Qiong se abren para aceptar nuevos discípulos. La predicción de Shen Qingqiu había sido correcta; ese pequeño encargo que aceptaron por capricho les llevaba décadas, ya era el Señor Pico y aún así, el chico de esa adivinación no había aparecido.

Shen Qingqiu razonó que quizás era el destino haciendo su trabajo después de todo, porque le costaría mucho aceptar discípulos si no fuera un Señor de Pico. Acompañaba a su maestro cuando aún era el discípulo principal, preguntaba a los individuos que llamaban su atención, pero ninguno llevaba nunca el nombre que deseaba. Había demasiados participantes cada año y no era como si tuvieran una lista de nombres. Por lo tanto, el ritual de Shen Qingqiu era bajar anualmente para comprobar loa aspirantes a ser el niño de la adivinación.

Yue Qingyuan lo sabía y naturalmente siempre ayudaba a Shen Qingqiu. Ni siquiera los otros Señores de Pico eran tan diligentes a la hora de peinar la multitud en busca de nuevo potencial. Como no podía molestarse en preguntarle a cada persona su nombre, Shen Qingqiu sólo le preguntaba a cualquier niño que él u otro Señor Pico escogieran por su nombre. A los otros señores de pico les molestaba enormemente que incluso si veían primero a un nuevo discípulo potencial, siempre era Shen Qingqiu el primero en acercarse y preguntarle su nombre. Pero nadie podía hablar, porque Yue Qingyuan le permitía hacer lo que quería.

La mayoría, si no todos los Señores de Pico, sabían que ambos entraron en la secta al mismo tiempo y que se conocían antes de eso. Apenas podían decir que no era favoritismo porque Shen Qingqiu normalmente no se molestaba en entretener a los mimos de Yue Qingyuan y no les gustaba que su líder de secta se desviara de su camino para ocuparse de Shen Qingqiu. Sin embargo, había cierta indulgencia por parte del Líder de la Secta, y Shen Qingqiu a menudo tenía libertad para elegir cuándo aprovecharse de ella, lo que no le dejaba una reputación sobresaliente con los otros picos.

El hecho de que Shen Qingqiu normalmente se fuera sin decir una palabra después de preguntar por sus nombres, permitiendo a los nuevos reclutas ir al Señor de Pico que originalmente los quería también era irritante. Cuando los niños se enteraban de que fue el Señor del Pico Qing Jing quien los pasó por alto, tenían sentimientos encontrados. Felizmente se unieron a la secta, pero se fueron con baja autoestima pues el Señor del Pico Qing Jing no les había prestado atención. Las bocas maliciosas de los jóvenes descarados a veces susurraban cosas inadecuadas y las peleas que estallaban, daban a cada Señor de Pico un buen dolor de cabeza.

Los únicos Señores del Pico que no sufrieron de esto fueron: Qi Qingqi que sólo aceptaba discípulas femeninas, y Liu Qingge que no se molestaba en seleccionar específicamente a los reclutas. Si eran lo suficientemente buenos como para pasar y solicitaban el Pico Bai Zhan, eso era todo lo que importaba. A pesar de no ser la primera o segunda posición, Liu Qingge entendía lo suficientemente bien el atractivo de su pico como para saber que nunca le faltarían discípulos aspirantes. Los picos no se clasificaban en función de sus puntos fuertes, por lo que no tenía sentido tenerlo en cuenta de todos modos. Aún así, eso no le impidió estar en desacuerdo con Shen Qingqiu. Su pelea había comenzado en la Competencia Anual, en la que Liu Qingge venció a Shen Qingqiu.

Cómo Entrenar a tu Shen QingqiuWhere stories live. Discover now