MEMORY

10

Hyunjin solo miraba a Changbin, lágrimas salían de sus ojos, el amaba a Changbin lo hizo cuando estaba vivo y también lo amaba ahora que estaba muerto.

- Hyunjin - Volvió a decir el mayor.

- Changbin es momento. - Se arrodilló para acariciar el cabello del nombrado.

- No Hyunjin, por favor, prometí amarte toda mi vida, prometí que estaría a tu lado, Hyunjin, yo soy una....una mierda de persona no te cuide, lo asiento. - Changbin miro a los ojos a aquella persona que amaba de forma pura.

- Deja de decir tonterías amor, nadie sabía que pasaría ese día, no te culpes Changbin. - Hyunjin a pesar de la nueva forma que tenía aún irradiada belleza, frágil.

- No te vallas, no me dejes otra vez, te necesito tanto. - El mayor lloró sobre las manos del otro.

- Te seguirá dañando el recuerdo, el destino tiene muchos planes para ti, para ti que aún estás vivo, no estás solo Changbin jamás lo has estado.
Tienes a tu familia, a Minho, BangChan y ahora lo tienes a el. - Dijo señalando a Felix. - Y me tendrás a mi, viviré en tus recuerdos, sólo no dejes que estos te lastimen y se conviertan en dolor, recuerdame en color rosa y sonriente.

Changbin se negaba a escuchar, no importa si Hyunjin está muerto, no importa si solo el lo ve, sólo quiere seguir amándolo.

- Hyunjin..... -

- Quiero descansar Changbin, quiero ir al prado de lirios y hacer que mi alma sienta la paz. - El rostro de Hyunjin tenía una muy grandes y oscuras ojeras, a pesar de que si rostro estaba roto se veía lo pesado que era seguir de pie.

El mayor quedó en trance, se había vuelto egoísta, sabía que lastimaba a Hyunjin, recordó todas esas noches en las que su amor lloraba por no dormir, que estúpido se sentía Changbin.

Hyunjin lentamente se paró y se acercó a la ventana, el sol hacia que pareciese un ángel.

- Cuando nos mudamos aquí me enamoré de la hermosa imagen que me daba está ventana, tu también lo amas sólo estás cegado. - Hyunjin miro una última vez a través del cristal.

- Siempre he amado a Seúl asi como te amo a ti, no dejes que el dolor te ciegue. - Hyunjin limpio sus lágrimas.
Estás listo.? - Preguntó, Changbin lo pensó y finalmente asintió, Hyunjin sonrió de una hermosa manera. - Te amo Changbin, vive feliz.

Después de aquéllas palabras un fuerte ruido de cristal rompiéndose sonó en toda la casa, en cuestión de segundos el frío había desaparecido y la calidez llegaba.
Lo que alguna vez era la presencia se Hyunjin se convierto en una especie de polvo brillante, este se filtraba por las orillas de aquella ventana y daban un recorrido por los cielos.

- Desde que Hyunjin falleció, jamás volví a ver por esta ventana, es una hermosa imagen, que tonto soy. - Changbin después de minutos volteó a ver a Felix, quien nunca paró de llorar.

- Ya no quiero ser un tonto -