ㅡ Me gustan más las fiestas de por aquí ㅡmencionó Taehyung hacia el omega, quien comía un coctel de piña gustoso. Era su fruta favorita.

        ㅡ Hay mejores bocadillos ㅡasiente conforme, dirigiendo su mirada hacia el alfa, que no despega la suya del grupo de chicas que bailaban en la pista, meneando las caderas al tradicional ritmo de aquel lugarㅡ Todos los alfas son unos completos cerdos ㅡse queja el menor, entornando la mirada con claro disgusto.

       Taehyung frunció el ceño, confundido de ese despectivo comentario; cayendo en razón segundos después.

      ㅡ No, no no no. Yo no miraba eso que piensas, ni siquiera me van las chicas ㅡse trata de explicar, ganándose una mirada incrédula por parte del castaño. Él suspira en rendiciónㅡ Mira, ven.

       Taehyung señala hacia dónde antes miraba; entre toda esa masa de personas bailando, señaló a un par de hombres, que tejían collares lei de flores azules.

        ㅡ ¿Esperas que crea que tu atención estaba en hombres tejiendo cuando hay un grupo de chicas hermosas con curvas de infarto, bailando frente a ti? ㅡenarca una ceja, molesto de que quiera tomarle el pelo.

         Taehyung suspiró, negando.

       ㅡ Mira bien ㅡseñaló. Fue cuando el omega deparó en el sujeto junto a ellos, que tomaba varias botellas para inclinarlas en un enorme recipiente de forma extraña; aparentemente, una máscara que sonreía tétrica.

         ㅡ ¿Qué es eso?

         ㅡ Tío Akamu me contó que, en este lugar, preparan una bebida especial para razas, la cual supera tus propios genes por desechar el alcohol. La única bebida que verdaderamente puede embriaga tanto a alfas como omegas ㅡexplicó, sonriendo triunfal, cuando la expresión del menor le dio a entender que había captado el punto.

         ㅡ ¿Te gusta beber? ㅡesta vez pareció confundido.

         ㅡ Las bebidas hawaianas son lo mejor que hay ㅡasintió con una enorme sonrisa, antes de despeinar en un amistoso gesto, el cabello del menorㅡ Espera.

         ㅡ ¿Qué?

         ㅡ ¿Estabas celoso? ㅡle miró divertido, con el único objetivo de molestarle.

         ㅡ ¿Debo recordarte que tengo novio, tonto alfa? ㅡcuestionó molesto, mirándole con cierta amenaza. Jungkook, sin duda, es un omega bastante singular.

        ㅡ ¿Debo recordarte que soy tu alfa, pequeño omega? ㅡsu voz disminuyó una octava, consiguiendo así, erizar la piel del menor, su lobo sólo delatándole ante el creciente dulce aroma.

        ㅡ No cruces la línea, Kim Taehyung. Sólo somos amigos... Aliados ㅡadvierte, dándole la espalda para ir por más piña colada; siente las mejillas calientes, y el cuerpo muy acalorado. Taehyung  era un alfa mediocre, y cuando no debía, usaba su poder de alfa.

Taehyung suspira, mirando el restante de su copa. Tenía que dejar de guiarse por ese tonto instinto, últimamente estaba más rebelde de lo usual.

        ㅡ Vaya, príncipe Taehyung ㅡuna aterciopelada voz masculina llegó hasta él, encontrándose con un muchacho de claros rasgos coreanos, y cabellera dorada como la miel.

      ㅡ ¿Te conozco? ㅡenarcó una ceja, tratando de descifrar la raza del chico frente a él. En primer lugar, creyó que se trataba de un beta; pero, más tarde, captó que su aroma se confundía entre frescas guirnaldas pendiendo de sus collares.

Amour PlastiqueWhere stories live. Discover now