Hɪsᴛᴏʀʏ3 Tʀᴀᴘᴘᴇᴅ ﹙圈套﹚Tʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏ́ɴ ᴀʟ Esᴘᴀɴ̃ᴏʟ

History 3 : Capítulo Uno.

—¿De verdad?

Su emoción por la noticia apenas duró tres segundos cuando las siguientes palabras de Li Zhen le dieron en el clavo, directo al infierno.

—Lo he abortado.

Con total incredulidad, Chen Wen Hao mira a la mujer que ama y le pregunta:

—¿Qué has dicho?

—Fui a abortar.

El tono de Li Zhen es absolutamente uniforme y tranquilo, como si no se hubiera limitado a quitarle la vida a un niño. Sus ojos son fríos, tan fríos y helados que duelen. Chen Wen Hao presiona su mano contra el cristal, llorando.

—¿Por qué? Es nuestro hijo... ¿por qué?

—Wen Hao, tú y yo vivimos en mundos diferentes, nunca podremos estar juntos. De ahora en adelante.... cuida de ti mismo... —dice Li Zhen sombríamente, y sin decir una palabra más, deja el auricular encendido sobre la mesa.

Sale de la sala de reuniones con un aire de finalidad, con la intención de no volver a mirar atrás nunca más.

—¡Li Zhen! ¡Li Zhen, escúchame! Li Zhen!

Chen Wen Hao golpea el cristal con todas sus fuerzas, pero no importa cuánto grite y golpee el cristal de vidrio, no puede llamarla, esta mujer que ya ha hecho su elección, lo ha abandonado. Ver a Chen Wen, la cara de Tang se llenó de lágrimas, el hombre que estaba de pie en el costado levanta de nuevo el auricular, preocupado, tratando de calmar al agitado y desconsolado Chen Wen Hao.

—¡Wen Hao, cálmate y escúchame! Escúchame...

Malinterpretando el intento del hombre de calmarlo y pensando que Tang Guo Dong está haciendo, Chen Wen Hao le grita a Tang Guo Dong. Tang Guo Dong quien prometió que él ayudaría a mantenerla en la oscuridad, pero en vez de eso la trajo aquí.

—Tang Guo Dong, ¡bastardo! ¿Cómo pudiste hacerme esto? Si no eres lo suficientemente capaz, entonces no lo hagas, si no, cuando salga te mataré. ¡te matarte! ¡te matarte! Ugh.

Los dos guardias de la sala de reuniones se apresuraron inmediatamente hacia Chen Wen Hao, sacando a la luz esposas para detener su comportamiento violento. Chen Wen Hao, en su arrebato de rabia, ataca a todos los persona que intenta acercarse a él, hasta que llegan refuerzos con pistolas paralizantes para detener al prisionero.

Chen Wen Hao finalmente se calla y deja que los guardias de la prisión se lo lleven para que lo encierren de nuevo a su celda asignada, parecida a una vieja muñeca vieja y sucia que ha sido abandonada.

—¿Cómo podría...? ¿Cómo podría traicionarte...?

Tang Guo Dong murmura en el receptor vacío, sus ojos están siguiendo a Chen Wen Hao mientras es arrastrado hasta la distancia.

Hace cuatro años

—Xiao Tang, puedo subir solo, espérame aquí —le dice Tang Guo Dong a Tang Yi.

A cargo de la conducción, mira a tang yi mientras baja el coche donde se ha detenido en la entrada del sendero.

—¿Por qué? ¿Con quién te vas a reunir? ¿Por qué no me dejas seguirte?

Tang Yi, que sólo deja que su fleco frente a la gente en la que confía y sus ojos perdiendo la nitidez de un miembro de Xing Tian.

—¿Puedo ir contigo?

Tang Guo sonríe ignorando la pregunta del niño, deja a Tang Yi teniendo con la una caja de cigarrillos en sus manos, pero antes de subir por las sucias escaleras.