Ya siendo las dos de la tarde los estudiantes de la secundaria del purgatorio salían de clases, un chico rubio salió a toda prisa en su bicicleta para dirigirse a su casa, su nombre era Meliodas, tenia tan solo 15 años de edad, era un chico muy alegre y coqueto, varias chicas de su clase soñaban con salir por lo menos a tomar un helado con el pero ninguna a tenido tanta suerte
Se preguntaran porque iba muy rápido, ¿será que sus padres lo castigaran si llega tarde? Pues no el chico sólo se apresuraba a llegar para ver una persona, dio la vuelta a la última esquina y sonrió al ver que ya estaba serca,al llegar bajo de su bici y la orojo en el jardín, entro corrieron a su casa y pasó por la sala para llegar a la cocina, ahí vio aquella persona en la cual no dejan de pensar en todas sus clases
Meliodas: Elizabeth!!
La chica peli plateada volteo a verlo y le regalo una linda sonrisa, a Meliodas le gustaba mucho verla, ella era una de las empleadas de su casa y desde que llego fue muy linda con el, Elizabeth tenía 20 años y le gustaba mucho consentirlo
Elizabeth: Meliodas Bienvenido
Meliodas: Eli Eli Eli
El corrió con los brazos abiertos hacia ella para poder abrazarla, pero alguien se interpuso en su camino, se trataba de Gelda una chica de igual mente 20 años de edad y también empleada de la casa, el chico choco con ella quedando su rostro entre su pechos
Gelda: Hola Meliodas(sonriendo)
Elizabeth: Gelda(dijo algo seria)
Meliodas:(separándose de la chica) ay lo siento Gelda
Gelda: No te preocupes pequeño
Elizabeth: Gelda yo atendere al joven Meliodas, será mejor que tu te apresures a tus deberes
Gelda: tranquila lo are(mira a Meliodas) adiós pequeño
Meliodas: a..adios (sonrojado)
El volteo a ver a la peli plateada y la abrazo haciendo que su rostro ahora quedará entre los pechos de ella
Meliodas: te extrañe mucho
Elizabeth; Pero sólo te fuiste unas horas
Meliodas: igual te extrañe
La chica acaricio su cabello y sonrió al ver el sonrojo del rubio,como siempre el chico comenzó a apretar sus pechos ya que eran muy subes y calentitos o al menos eso era lo que el decía, a ella no le molestaba que la tocará ya que le gustaba concentirlo de esa manera
Meliodas: Eli, podemos jugar(dijo con una gran sonrisa)
Elizabeth: claro
Ambos subieron a la habitación del rubio y se sentaron en su cama, como siempre Meliodas comenzó a apretar sus pechos, la chica apartó las manos del rubio y se arrodilló frente a el, bajo el cierre del pantalón del chico sacando su miembro
Elizabeth: veamos si es cierto eso de que me extrañabas
La chica comenzó a acariciar de arriba a abajo el miembro de Meliodas, el tan solo gruñia por el gran placer que sentía, provocando así que su miembro creciera un poco más, a la chica le alegraba eso ya que sabía que le estaba gustando, ella comenzó a pasar su lengua por la punta del miento del joven, apesar de ser tan solo un niño de 15 años a ella le gustaba hacer ese tipo de cosas con el
Comenzó a meterlo por completo a en boca mientras el la miraba con un gran sonrojo, No era la primera ves que la peli plateada le hacía algo así pero cada ves que lo hacían era maravilló, mientras ella metía y sacaba su miembro de su boca Meliodas movía un poco el cabello de la chica para poder verla mejor, le encantaba el echo de que una bella mujer estuviera haciéndole ese tiempo de cosas, el sentía que en cualquier momento llegaría a correrse pero entonces la chica se detuvo
