Había comenzado una guerra sobre un tal kira hace unos días.
L el detective más famoso lo había retado, había descubierto qué Kira estaba en Kanto.
Yo con mi 24 años soy Jefa de policía, tenia a mi disposición a 59 agentes. Pero hace pocos días Kira los mato con un paro al corazón.
Sabia perfectamente que lo haría, sabia que fracasaría. Pero aun así decidí hacerlo. Todo por mi maldito orgullo 59 policías habían muerto.
Cargo con esta culpa todos los días, lo peor es que aun no se sabe quien es kira.
Quiero vengarme y que la culpa que todos los días me carcome por dentro desaparezca. Quiero poder dormir tranquilamente, que las ojeras qué tengo desaparezcan.
Estaba bebiendo un café súper cargado en las oficinas cuando las pantallas se apagaron y después, de volvieron a prender con una L en negro con el fondo blanco.
Todos se sorprendieron y de la nada apareció un sujeto. Por lo que se es Watari. No se le veía el rostro ni nada. Este tenia una laptop con el mismo fondo.
De la pantalla salio una voz distorsionada. Decía una serie de cosas.
Lo último hizo qué me levantará de donde estaba.
- Esto será peligroso, como saben Kira mato a 59 agentes de policía al enterarse de que no estaban a su disposición. Esto quiere decir que Kira matara a cualquier persona que se ponga en su contra.
Puede qué alguien muera en el trascurso, pero quiero pedirles un favor... Si se unen a mi podemos vencerlo. ¿Quien esta conmigo?
Hubo varios comentarios negativos, aquella voz había parado haciendo una ruido incomodo, todos se veían.
- ¡Yo quiero! - Todos me miraron pero no les hice caso y avance un poco al frente.
- Pero Shiro-san. - Matsuda Hablaba con nerviosismo.
- Si es así, yo también. - Hablo el señor Yagami y a este se le unieron 4 más con Matsuda incluido.
- Yo renunció, prefiero perder mi trabajo qué mi vida. - Hablaban unos con repugnancia en su voz.
Era de esperarse, no tienen por algo que seguir. Había salido de las instalaciones varios de los agentes con los que había compartido mi trabajo.
- Lo siento Jefa. - Suspiro - Pero tengo familia.
Asentí y lo abrace. Todos se despidieron de mi antes de salir.
- Bien si son todos... - Hubo un silencio. - Watari entregarles la dirección. Mañana a las 5 en punto nos veremos en la dirección que Watari les dará.
Watari vino hacia mi y me dio un papel con la dirección de lo que seria nuestra reunión mañana.
Hizo lo mismo con todos, se despidió y se fue.
Todos salimos de las instalaciones. La verdad que había sido un día bastante raro, fui a por mi coche y fui a mi casa. Quería descansar los antes posible.
Al día siguiente me levante a las 3 de la madrugada, aun sigo sin poder dormir. Siempre que lo hago me imagino a todos caer, gritar y agonizar.
Todos eran mis amigos, aquello 59 agentes de policía eran lo único que tenia y aun así... Yo... Los mate. Las lágrimas ya caían de mi rostro intente calmarme y prendí un cigarro qué tenia en la mesita de noche.
No puedo con tanto peso, pero quiero vengar los.
Se que atrapare a Kira cueste lo que cueste.
Al día siguiente me levante como de costumbre, no dormí mucho, máximo dos horas, me mire en el espejo qué tenia en el baño, y si tenia ojeras grandes, mi cara se veía cansada, tenia el cabello super alborotado. Me di una ducha y me puse mi traje.
Desayune un poco de cereal con leche para después lavarme los dientes y dirigirme a la dirección que el tal Watari, no había dado.
Era un hotel, un gran y lujoso hotel, me adentre en el y justo cuando la recepcionista me llamo y un señor un poco viejito me llamo por mi nombre.
