Caminando por las calles de Kanto, L me hablaba por teléfono mientras bebía mi café helado.
- Me estás diciendo que traerlas al Kira a trabajar con nosotros.
Algo estaba mal en L, lo conozco desde la infancia.
- Así es... -Suspiro- Tengo la ligera sospecha de que Light Yagami es Kira.
- Bueno, tú eres el detective número 1.
Colgué el teléfono y pase a una pastelería que quedaba un poco cerca del hotel donde nos estábamos quedando.
Yo la verdad es que no soy inteligente como L, mis aptitudes se basan en la de un criminal, eso quiere decir que se pensar como uno, pero en si, no es nada importante como todo lo que hace Lawliet. Yo, solo soy su mano derecha.
- Hola buenas noches. - Hablé amable mientras entraba a la tienda de pasteles. - ¿Puedo pedirle un pastel de fresas? Por favor.
- Claro que si. - La señorita que atendía se veía nerviosa por lo que opte a seguirla con mi vista.
Sabía perfilar muy bien, era muy famosa pero trataba de mantenerme oculta, no me gusta mucho llamar la atención. .
Algo pasaba y la chica estaba muriendo de miedo, mi instinto me dijo que había alguien detrás de todo esto. Probablemente amenazando la y creo saber dónde puede estar.
- Suelta el arma y no saldrás herido. - Hablé tranquila apuntando con mi arma al otro lado del mostrador. - Te doy 10 segundos.
Y así empecé a contar, solo escuché un rechitar y un tipo con capucha se levantó.
La chica de hace rato estaba atrás en el marco de la puerta llorando.
- Si haces algún movimiento te disparó justo en la cabeza. - Hablé, mi mirada era fría.
- Eres policía, no puedes dispararme. - El chico me apuntaba pero sabía que estaba nervioso. Debe ser su primera vez.
- Sabes...Es el típico lugar donde se esconde un asaltante. Es tu primera vez ¿no?
El sujeto se impresionó.
- Y para tu información, no soy policía. - Hablé con sadismo mientras de un rápido movimiento le quitaba el arma de sus manos. - También mato gente.
El chico intento escapar pero logré meter mi pie cuando corría para caerse. Me acerque con una sonrisa sombría mientras reía.
- Por favor. No me hagas nada... Te lo suplico.
- Blah Blah - Suspiré y lo mire con aburrimiento. - Es siempre lo que dicen cuando los tengo en mi poder.
El chico no paraba de mirarme con miedo.
- Bien... -Saque unas esposas y lo espose. Hice que la chica llamara a los policías y se lo llevarán.
Yo no era ni nada más ni nada menos que un tipo de antihéroe trabajando por mi cuenta, no me importaba si tenía que matar a alguien haciendo justicia. Aún así, no estaba a favor de Kira, por su culpa me estaba quedando sin trabajo.
Sali de la tienda con el pastel en mano. No sin responder algunas preguntas de los policías.
- ¡Llegué! - Hablé a la puerta para que Watari me abriera. - Traje pastel.
Y un Elle somnoliento apareció mirando me fijamente.
- Te traje pastel. - Me acerque a el y le di una rebanada que minutos antes ya había cortado.
- Gracias. - Con tono neutro me agradeció y se volvió a retirar.
- No te preocupes, Señorita Shu. - Me tomo de los hombros. - El señor L a estado de malas todo este tiempo.
