⚜️CAPITULO 21. ¿Sociedad secreta? ⚜️

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-¡No puedes salir despues del toque de queda!- exclama Hanna- Te expulsaran si te encuentran.

Cuando le comunique a mis amigas que saldria, Hanna es la que mas histerica se ha puesto

-Vamos, Hanna... Tiene permiso para salir- dice Jenna aburrida. Lena hace un sonido de asentimiento en apoyo mientras me señala.

-¡Exacto! Es igual que cada noche, a diferencia que esta vez no ire a entrenar... Ademas, Charlotte me va cubrir con los demás. En este momento debe estarle diciendo a mis hermanos que estoy muy enferma. 

-Bien... ¡Pero abrígate!- grita. Jenna, Lena y yo la volteamos a ver divertidas y confundidas, mientras ella solo lanza una profunda exhalación- ¿Que? Afuera hace frio.

-Llevare una sudadera y la bufanda, si eso te hace sentir mejor- rio divertida mientras me coloco la bufanda.- Estén tranquilas, tengo permiso y en todo caso, parece que voy a entrenar.

Me miro en el espejo, de hecho si me topara un profesor no levantaría sospechas. Llevo un leggins, una tenis y la sudadera que suelo llevar (excepto el día que me tope con los gemelos porque obviamente la olvide), podre disimular fácilmente.

-Bien, nuestra pequeña Julieta... Ya es hora de que vayas saliendo. Tu Romeo debe estar esperando por ti- dice Lena divertida.

-¿Quienes son Romeo y Julieta?- pregunta Hanna confundida.

-Luego te lo cuento- dice Jenna poniéndose de pie y empujándome hacia la puerta de nuestro dormitorio- Es hora de que te vayas.

-¿Me estas echando?- pregunto ofendida. Detrás de mi mis amigas ríen.

-¡Si!- exclama Lena cerrando la puerta

-Si serás zorra...- murmuro, contra la puerta.

Suspiro antes de bajar las escaleras, las pocas personas que están en los mesas de estudio no voltean a mirarme. Warrington y Pucey están en la mesa más alejada y es una suerte que no noten mi presencia o empezarían hacer preguntas.

Enarco las cejas al ver que no hay nadie en el pasillo. Debería estar aquí... Una idea cruza por mi mente, no no no y no, me niego a creer que me ha dejado plantada. Decido caminar un poco, pero no lo veo por ningún lado... ¿Que voy hacer ahora? No voy a entrar y decirle a mis amigas que me han dejado plantada. 

Me quedo un momento quieta y contengo la respiración, algo se ha movido a mi derecha. Un pequeño susurro de algo al arrastrarse en silencio. No estamos solas, susurra mi subconscienteEstiro la mano y siento como el látigo en mi mano empieza a deslizarse. No estoy sola, eso es más que obvio, pero no hay nada...  Cierro los ojos un momento y me concentro, el mismo susurro a mi izquierda. Tiro el látigo hacia mi izquierda a toda velocidad, cuando lo siento enrollarse en algo tiro de él y escucho un cuerpo caer sobre el suelo y una maldición.

-¿Quieres matarme?- Fred aparece ante mi en el suelo. -¿Que es eso? ¿Un latigo? ¿De donde sacaste un látigo?- abre los ojos.

Siento mi rostro enrojecer.- Eso no importa... ¿Tienes una capa de invisibilidad?- señalo la capa en su mano- ¡Es genial!

Reprimo una risa mientras Fred se pone de pie y se frota el trasero.- Es de Harry, se la he pedido prestada.- mira de nuevo el látigo en mi mano que ha empezado a enrollarse de nuevo alrededor en mi muñeca- Vaya que tienes fuerza para tirarme de esa manera con un simple movimiento de muñeca. ¿De donde lo has sacado?- sus ojos brillan de curiosidad.

-Te dije que no era una debilucha...- sonrió al recordar nuestra pelea en la enfermería- Un regalo de mi hermano. Una larga historia.

-Siempre he pensado que esa frase se utiliza para evitar contar las mejores historias, pero no te libraras de mi Herondale- estira su mano para que la tome- Vamos, quiero mostrarte mi lugar favorito.

Un amor, dos mundos. - Fred Weasley [Editando]Where stories live. Discover now