🇯🇵Headcanons of the Japanese Family🇯🇵

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Era un día nublado en el territorio japonés, parecía que iba a llover .

Estaban en minazuki ,temporada de lluvias que describe perfectamente como es Junio en aquel territorio.

El imperio estaba en su tradicional hogar, arreglando los últimos papeles de su trabajo mientras esperaba a su hijo, quien terminaba de arreglarse para ir a la escuela.

--Japón!!! apresúrate!! -grito lo suficiente como para que el menor lo escuchase-

--ya voy, papá!! -también grito lo suficiente igual para que su progenitor le oiga-

Luego de ese aviso, volvió a mirar su uniforme ,aun no se cambiaba su pijama.

Últimamente a estado teniendo gustos diferentes y ese día ya no estaba seguro de querer usar su uniforme masculino. Quería probar algo nuevo, eso incluía el uniforme femenino que usaba sus compañeras de salón.

No sabia si era buena idea
¿Que tal si se burlan de él?

Además ,estaba la opinion de sus profesores ¿Que dirán al respecto?

Pero si algo sabia ,es que su padre le brindaría todo su apoyo, siempre fue muy bueno y dulce con él...bueno, casi siempre. Había momentos en los que solía alzarle la voz pero luego se disculpaba.

Eso es, la opinion de los demas no le importaría, la de nadie, con solo saber que su padre lo apoya en su decisión le daba fuerzas suficientes para atreverse a hacer cosas nuevas, cosas que nadie se había atrevido a hacer. Le daba valor.

Teniendo todo ese positivismo, saco el uniforme femenino que escondía y se lo puso.

(...)

El mayor esperaba impaciente cerca de la puerta principal mientras leía unas hojas, se les estaba haciendo tarde.

En ese mismo instante, escucho unos pasos ,eran los de su hijo, se oía claramente que corría.

--Papá!! ya estoy lista!! -habló una voz femenina infantil-

Espera.....femenina?

Dirijo su mirada a quien estaba en su delante y lo que vio, lo dejo sin palabras.

Era...una niña, no ;el nunca había había tenido una niña, pero ...¿Quien era ella? y ¿Por que le decía papá?

--¿Te gusta mi uniforme nuevo? -pregunto con alegría e inocencia- prefería usar algo nuevo y creo que soy hábil haciendo que mi voz parezca a la de una niña- poseía una tierna y adorable sonrisa-

Oh pero su padre....su padre no sabia como reaccionar ,su propio hijo, estaba actuando de una manera muy rara.

Considero que eso era....una deshonra para la familia.

Japón esperaba una respuesta positiva de su padre ,pero lo que recibió a cambio....nunca podrá quitarlo de su memoria.

Su progenitor, se acerco a paso furioso hacia el y le dio una fuerte bofetada. Tanto así que fue capaz de tirar a su sucesor al suelo.

El pequeño solo se quedo ahí, sosteniendo su mejilla derecha que fue golpeada por quien menos espero ser tratado de esa forma. Estaba en shock ,sus rodillas temblaban pues el miedo lo había invadido como a la vez sentía mucho dolor, no solo por la bofetada, sino que también lo sentía en su pecho ,muy adentro, justo en su corazón.

--Que demonios...crees que estas haciendo?! -lo último lo dijo gritando de rabia e ira-

-- y-yo...-tartamudeaba del miedo, no se atrevía a mirarlo a la cara-....solo...s-solo quería..

--Querías que?! Querías que se burlaban de ti por usar esa basura?! -dijo tomando bruscamente la muñeca de su niño y jalandolo hacia la salida-

--N-no!! espera!! p-papá! -quería tomar su desayuno, que solo era una taza de te y eso para el era suficiente pero esta vez no pudo, ademas quería agarrar su abrigo por el frío, solo tenia puesto una falda y blusa liviana-

El mayor hizo caso omiso y salieron de la casa dirigiéndose a paso apresurado a la escuela del menor, no había tiempo para que se cambie de uniforme.

Durante el camino, su hijo pedía que se detenga e ir por su abrigo o que le compre algo de comer, sus súplica fueron en vano.

Llegaron a la escuela. El imperio solo dejo a su niño haciéndolo entrar de un empujón y se fue.

Sin decirle nada y mucho menos darle su beso en la frente que siempre le daba a su hijo.

Ese día, pensaron que era una alumna nueva ,grande fue la sorpresa cuando el joven japonés dijo que era él. En todo el día no dejaron de molestarlo, incluyendo las niñas.

(...)

Lluvia

Era lo único que había en esas horas de la tarde y el cielo completamente gris.

Japón solo tenia la mirada baja, con la ropa empapada y muriendo frío.

Se encontraba fuera de la escuela, esperando a que vengan por él ,era el último alumno, ya no quedaba nadie y muy pronto se haría de noche como a la vez no había comido nada ,ni desayuno ,ni almuerzo.

Mucho menos pudo comer en el receso, se la paso escondido en el baño por culpa de unos compañeros que solo querían hacerle daño por vestir como niña.

(...)

--Auch! -un estornudo, había terminado resfriandose-

--Hay ,como pudo quedarse hasta esas horas esperando -hablo preocupada una sirvienta mientras arropaba al menor-

--Que nadie fue a recogerlo? -dijo otra sirvienta, quien tenia entre sus manos el uniforme empapado-

--Su padre nos dijo que él iría a recogerlo pero al parecer tenia tanto trabajo que no pudo ir -hablo quien lo arropaba- ahora deve descansar, lo bueno es que ya ha cenado, ahora necesita descansar -dicho esto ,ambas mujeres salieron de la habitación-

Japón solo se sentía triste, destrozado, olvidado ...abandonado. Pensó que su padre ya no lo quería.

Pero el ruido de la puerta abriéndose lo saco de sus pensamientos ,al ver la silueta aquella se percuto que era su papá, de inmediato se escondió en las frazadas con miedo a ser golpeado otra vez, a que le grite e insultase.

Los pasos se fueron acercando a su cama, tenia su corazón en la boca, sentía que en cualquier momento su progenitor quitaría las frazadas y golpearlo a como de lugar.

--Lo siento...

Fueron las palabras que lo hizo salir de entre las frazadas ,su padre estaba sentando al borde su cama, dándole la espalda.

--Lamento haberte gritado, no debí hacerlo....mucho menos golpearte -su voz sonaba arrepentido y quebrada, parecía que en cualquier momento iba a llorar-

--Tengo frío -fue lo que dijo el menor, aun un poco asustado-

Imperio ya sabia que significaba eso, no era la primera vez que lo escuchaba.

Su pequeño se levanto quitando las frasas a lo que su padre también se levanto y lo cargo entre sus brazos llevándolo a la habitación del adulto.

Al estar ahí, lo arropo en la cama matrimonial ,el pequeño se sentía mas a gusto durmiendo ahí, era más cómoda que su cama y más calentita.

El mayor se cambio en el baño y fue a dormir abrazando a su hijo. Eran de esos momentos en los que podía abrazar por mucho tiempo a quien aun consideraba su bebé.

Como su hijo era mitad felino, este comenzó a ronronear y a los minutos quedo en un profundo sueño. El mayor solo acariciaba su cabeza mientras que a la vez lo abrazada y esta vez si le dio su beso en la frente ,él podía llegar a ser un padre muy amoroso, que daba muchos mimos a su hijo.

--Buenas noches, mi niño

Charlie, vengo inspirado.jpg