LOS LATIDOS DE LA PRINCESA DE CABELLO ROJO

Preparándose para el destino

-¿Y si entramos por este lado?- preguntó Kija señalando un punto en el mapa que todos estaban rodeando.

-Los soldados tendrían vista perfecta, nos atacarían de inmediato- dijo Hak.

-Tenemos que tener varias entradas, podríamos entrar por unas para distraer mientras el resto entra por otras- dijo Han-Dae.

-Eso es algo que Soo-Won descubriría de inmediato- contradijo Mundok- no hay que olvidar que ellos tienen buen entrenamiento militar y que de seguro están preparados para cualquier intento de ataque al palacio.

Yona los escuchaba en silencio, mirando a uno y a otro.

-Tenemos que pensar que Soo-won estará rodeado de los más fuertes, Han Judo estará con él- señaló Hak- él es un excelente guerrero, era el capitán del primer escuadrón de la primera escuadra real. Pero el que Soo-won esté rodeado de soldados no los engañe, es excelente en el combate.

-Tenemos un fuerte ejército de oponentes- apuntó Jae-Ha- no hay que subestimarlos.

Kija, que había estado en silencio tomó la palabra.

-Tenemos que conocer lo que los hace tan buenos, para saber cuál es la mejor forma de enfrentarlos.

-Kija tiene razón- apoya Shin.

-Veamos que tenemos- dice Yoon- en estos momentos desconocemos la cantidad de soldados que estarán en el castillo, podemos tener una idea con la experiencia de Hak y de las últimas visitas que ha hecho la tribu del cielo al castill.

Todos asintieron. Yoon continuó.

-Tienen un ejército conformado por excelentes guerreros de casi todas las tribus, tienen mayoría numérica.

-Así es- dice Hak.

-Sin contar con que conocen a la perfección el palacio-dice Yoon- tienen ventaja en el territorio.

-Conocer el lugar de la batalla les da una buena ventaja- apunta Kija.

-¡No!- dijo Yona y todos fijan la mirada en ella, que hasta ese momento no había pronunciado palabra- no hay nadie en ese castillo que lo conozca mejor que yo. No olviden que ese castillo era mi hogar. Tampoco olviden que Hak y Mundok también lo conocen muy bien.

-Princesa- le dijo Mundok con suavidad- ha pasado tiempo desde que ustedes abandonaron palacio, en ese tiempo Soo-Won y Han Judo deben poder recorrerlo sin tener que ver.

-Ya no tenemos esa ventaja- apoyó Hak.

Yona estaba molesta.

-Se equivocan- sentenció- tras la muerte de mi padre les puedo asegurar que no hay nadie que conozca ese castillo más que yo- dirigió su mirada a Zeno- y algo me dice que Zeno sabe de qué estoy hablando.

Zeno sonrió.

-Princesa- empezó a decir Mundok- se que todo esto debe ser difícil pero ellos nos tienen ventaja en estos momentos.

-No es así- repitió Yona con total seguridad- yo sé exactamente qué caminos tenemos que tomar hacia el castillo para que nadie nos vea, al menos hasta que estemos dentro.

-Princesa, cualquier punto- Hak señaló el mapa- alguien lo estará resguardando.

-No si no saben que existe- dijo Yona sonriendo.

Todos la quedaron mirando sin entender.

-Usaremos los corredores reales, nadie sabrá que estaremos allí, Soo-Won no tiene idea de su existencia, ni nadie a su alrededor, esa es nuestra ventaja.

-Nunca había escuchado de eso- comentó Mundok.

-Ni yo- dijo Hak.

-Porque es un secreto- explicó Yona.

-Soo Won es de la familia real- dijo Yoon- debe estar al corriente.

Yona sonrió.

-No lo sabe. Hace muchos años cuando yo era una niña entré a la sala sagrada con mi madre y encontramos unos manuscritos antiguos ocultos en la pared. Entre ellos había uno que hablaba de que en el castillo había un corredor oculto que lo conectaba al exterior. 

-¿Nunca se habló de eso, ni siquiera como rumor?- preguntó Jae-Ha.

-Nunca- Yona continuó- en ese momento cuando mi mamá me lo leyó creí que se trataba solo de una historia. Decía que es un corredor milenario, cinco de hecho, que solo podían ser abiertos por la sangre de los dragones y del rey Hiryuu. Ahora estoy segura que no era solo una historia, que ese manuscrito fue escrito hace miles de años.

Todos la escuchaban atentamente.

-Y tenemos a alguien que estuvo en esa época en el castillo- se dirigió a Zeno- ¿ese corredor es real cierto?

Zeno la miró.

-Así es- luego sonrió- ese manuscrito fue escrito por Zeno y Zeno lo conoce muy bien.

-¿Crees que todavía se puedan usar?- preguntó Kija.

Zeno asintió.

-Esos corredores son sagrados, existen para la protección del dragón rojo.

 -Tenemos nuestra puerta de entrada- dijo Hak sonriendo- eso nos da ventaja, el ataque sorpresa.

-Si solo la sangre de los dragones y del rey Hiryuu pueden abrirlos, eso significa que tenemos que armar cinco grupos- comentó Mundok.

-Así es- Zeno asentía.

-Podríamos atacarlos sin darles tiempo a prepararse.

Aquello le dio una idea a Yona.

-Tengo una idea mejor- miró a Hak- entrar sin que ellos lo sepan nos da una tremenda ventaja que podemos aprovechar para algo más que un ataque sorpresa. Soo-Won sigue con sus tareas de rey, nosotros conocemos cómo funciona el palacio, como suelen moverse los guardias, los horarios en que se apagan las luces. Las fechas de festividades de las tribus.

-¿En qué estás pensando?- Hak la miraba intrigado.

-Podríamos usar todos esos elementos a nuestro favor. Sabemos en qué momentos será más probable que no se encuentren, sabemos dónde se guardan las armas. Podríamos ingresar a los corredores y aguardar ahí, mientras que algunos entran a sabotear las armas donde las guardan y luego esperamos a que sea de noche para atacar. Reduciríamos su fuerza armada.

-Es un excelente plan- dijo Mundok con felicidad- no podría esperar menos de la princesa.

Yona le sonrió en agradecimiento, luego los miró a todos con seriedad y habló fuerte y claro.

-El castillo es mi hogar, es mi territorio y se los vamos a demostrar. Ellos cometerán un gran error si creen que me pueden volver a ganarme en mi castillo... esa noche atacaremos, recuperaremos el reino que So-Woon robó y arreglaremos el caos en las tribus. 

Todos asintieron.

En ese momento Hak y Mundok se arrodillaron y todos le imitaron.

-Estoy a su servicio princesa- dijo Hak- seré su escudo, su lanza.

-La acompañaremos aunque eso nos cueste la vida- dijo Kija.

-Zeno siempre estará con la señorita.

-Estaremos a tu lado Yona- dijo Shin.

-Nunca la dejaremos de acompañar princesa- agregó Jae-Ha.

-Nosotros la seguiremos hasta el final mi querida princesa- dijo Mundok- le serví a su padre y le serviré a usted y a su descendencia hasta que mi vida en este mundo se termine.

-Muchas gracias a todos, no podría hacer esto sin ustedes. Cuando ataquemos, volveremos todos, porque nosotros no buscamos poder, buscamos arreglar las cosas. Hay cosas que mueven este mundo que van más allá de lo que Soo-Won debe pensar. Ellos no saben lo que les espera. Yo ya no soy la pequeña princesa ingenua que ignoraba todo, volveré como lo que soy, la verdadera reina de Kouka.