Capítulo Único

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Well, aquí les traigo un fic que surgió un poco de la nada. Si gustan, les invitó a escuchar Blue de Troye Sivan, la cual use de inspiración para escenas románticas aunque al final no tuvo mucho con la trama, pero es buena ambientación. También les recomiendo escuchar las canciones que se van a ir mencionando, todo se vuelve más especial.

Y aunque algunos diálogos puedan ser algo suaves para Tsukishima, quiero recordarles que, exceptuando algunas partes, él conserva su cara amargada o una sonrisa burlesca.

Say that, enjoy it~

~o~o~o~

Tsukishima respiraba agitado tras el esfuerzo físico que realizó durante el entrenamiento, el cual había sido tan exhaustivo como siempre, aunque se enorgullecía al sentir que su cuerpo estaba acostumbrado. Comenzó a secar el sudor de su rostro con la toalla que Yamaguchi le había ofrecido.

Visualizó a lo lejos a Kageyama, quien estaba al lado opuesto de la cancha junto con Hinata y Yachi, conversando emocionados de quien sabe que estupidez. Nunca terminaría de comprender de donde sacaban tanta energía esos dos. Al final del día, él sólo quería en dejarse caer en su cama y quizás, con suerte, morir.

Esperó un rato hasta que la mayoría de chicos hubiese usado de las duchas. Como era de esperarse, muchos chicos de primer año habían ingresado al club y él aun no estaba cómodo con la idea de estar desnudo entre tanta gente. Además, solían ser muy ruidosos.

Decidió ducharse cuando supo que solo estaban Ennoshita y Yamaguchi. Tras terminar de asearse, salió del gimnasio con Tadashi a su lado como siempre, y luego se unieron a los otros de segundo año.

Yamaguchi hablaba con traquilidad con Hitoka, mientras Hinata y Kageyama alternaban entre sus típicas riñas e intervenir en la conversación. Kei se mantenía en silencio, sin prestar mucha atención a lo que decían, perdido en sus propios pensamientos. Se preguntó cuanto tiempo faltaba para el estreno del nuevo álbum de su banda favorita.

El dúo de idiotas acompañarían a Yachi a su casa, por lo que separaron sus caminos, mientras Yamaguchi lo siguió a su casa, pues pensaba pasar la noche ahí.

La señora Tsukishima los recibió amable como siempre, feliz de ver de nuevo a Tadashi, exclamando un "estas tan guapo" a pesar de haberlo visto hace no más de un mes e ignorando las muchas veces que su hijo le había dicho que no avergonzará al muchacho.

-Es una pena no poder acompañarlos más tiempo. Pero ya tenía planes de reunirme con unas compañeras. La cena esta en la nevera.

-Gracias -dijeron a la vez.

-Que pasen buena noche.

Tras disfrutar de la cena, Tsukishima comenzó a alistar las cosas para disfrutar cómodamente de un maratón de Star Wars aprovechando de no tener la presión de levantarse temprano.

-Entonces ¿Compraste palomitas de maíz? -dijo mientras se acomodaba en una de las esquinas del sofá. Kei no lo miró.

-¿Ehh!

-Ayer no alcance a comprar.

-Mal, Tsukki. Las palomitas son una parte importante de los maratones, ¿sabes? -dijo con tono de falsa reprimenda.

-Mamá hizo papas fritas -el rubio pudo ver como los ojos de su amigo brillaban.

-Te perdono, pero sólo esta vez -dijo con una sonrisa.

I'll colour me blueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora