familia Min-Park // YoonMin // Lemon

capitulo 5.

Pov Jimin:

Escuche como el auto estacionaba afuera. Me levante rapidamente del sofa a apagar las luces.

Escuche las llaves en la puerta y fui a cerrar las cortinas. Luego, lo vi entrar.

-llegue...- cerro la puerta detrás suyo.

-bienvenido cariño- me acerque a el y le di un pequeño beso, la sala estaba oscura, solo desde la puerta salía algo de luz debido a las velas.

-¿y esto a que es debido?- me pregunto, bajando sus manos a mi cintura.

-amm... Bueno, veras, desde que tuvimos a nuestros cuatro hijos no nos hemos dedicado tiempo a nosotros mismos como pareja, y... ¿Ya nos tocaba, no?- le sonreí.

Le tome de la mano y lo dirigí a la cocina, por fin pudiendo ver su rostro.

-¿se le apetece comer pollo a la plancha?- (quiero avisar, que no se si esto lo conocen en otros paises o si esto solo se come en Argentina, pero es pollo).

-pues por como huele me encantaría- se lamió los labios.

Me puse guantes de cocina y saque la bandeja del horno, agarre dos platos y serví la comida, luego los lleve a la mesa.

Me senté y mire a Yoongi.

Nos sonreímos.

-hace mucho que no hacemos esto- le sonreí.

Sus mejillas se colorearon de un rosado, adorable.

-¿recuerdas lo felices que estaban tus padres al saber que serían abuelos?- asentí sonriente.

-si... lo recuerdo, recuerdo como mi madre lloraba y mi padre sonreía con orgullo- sonreí mientras agarraba los cubiertos para comenzar a comer, al igual que el.

-me encantaría que mis padres lo supieran- suspiro.

Lo mire.

-tranquilo, algún día iremos a Daegu toda la familia y sorprenderemos a tus padres- hable cariñosamente, tomando su mano sobre la mesa.

Es que si, sus padres si bien sabían que el estaba conmigo, y de que su hijo era gay... Ellos no sabían que eran abuelos. Cuando Yoongi le conto de que salía conmigo, lo tomaron muy bien, terminaron diciendo que ya era bastante obvio y que nunca podría olcultarles nada a ellos. La verdad, antes de tener hijos, yo a esa frase no la entendía, ahora ya la comprendo a la perfección.

Terminamos de comer y colocamos musica.

-¿me concede esta pieza?- me dio la mano para que la sujetara.

Sentí la sangre subir a mis mejillas.

-p-pues claro- sonreí.

Me levante de mi silla y fuimos directo a la sala donde estaba todo oscuro, siendo iluminada simplemente por el resplendor de la luna que se reflejaba a travez de la fina tela de las cortinas del ventanal.

Coloque mis manos en sus hombros y el en mi cintura.

Le sonreí timidamente y la rola comenzó, provocando que nuestros cuerpos empezaran a danzar al ritmo de la dulce y lenta melodia, haciendo que los minutos pasasen aun más rapido.

Nuestros rostros fueron acercandose lentamente, provocando que nuestros labios esten rozandose a penitas, tan solo un centimetro más y podríamos unir nuestros belfos a la perfección.

Solo un centimetro, solo uno.

-¡YA LLEGUE FAMILIA!- la puerta se abrió de una forma brusca, haciendonos separar rapidamente.