Renacimiento (2ª Temporada de Sirvienta del Mal)

Capítulo 27

Después de clases Rin se fue a su hogar lo más rápido posible olvidando que su hermano mayor la esperaría en la salida. Ella corría por las calles como si estuviera huyendo y es lo que precisamente estaba haciendo, estaba huyendo del mayor dolor de su vida y corazón.

Rin: [no sé si podré soportar esto]

Algunas personas la miraban, pero ella no hizo caso y siguió corriendo, a veces chocaba con unas cuantas personas, pero nunca se detuvo. Las lágrimas nuevamente amenazaban con correr por sus mejillas y sus piernas comenzaban a sentirse pesadas.

Rin: [no quiero, no quiero perderte, pero tampoco quiero arruinar tu felicidad]

Se decía a si misma que dejara de estar pensando en Sesshomaru, pero su corazón le gritaba que fuera con él y le dijera que lo amaba. Deseaba arrancar ese sentimiento y mandarlo lejos para que no continuará con esa horrible sensación. Llegó a su hogar por fortuna su madre no estaba así que fue a su habitación a todo prisa, dejó su mochila al lado de la puerta y cerró la misma con seguro, fue a su cama y allí dejo que su almohada fuera testigo de su dolor.

CON SESSHOMARU...

Se había ofrecido a llevar a Sara a su casa, pero ella se negó pues traía su propio vehículo y no quería dejarlo en la escuela.

Sara: será para otra ocasión, pero de todas formas te lo agradezco

Sesshomaru: está bien. Ve con cuidado

Sara: lo haré

La vio subir a su vehículo e irse a una velocidad normal, en cuanto la perdió de vista él también subió a su vehículo y se fue. En el trayecto no quitó de su rostro una estúpida sonrisa de enamorado, así como también no dejaba de pensar en que haría para que Sara aceptará ser su novia, tendría que pedir ayuda a alguien ya que era pésimo para ese tipo de cosas.

Sesshomaru: [tal vez mi madre pueda aconsejarme]

Definitivamente su madre era la indicada para ayudarlo, solo en ella confiaría. Iba tan feliz que nada podría arruinarlo... O eso creía...

~~~~~~~Alucinación~~~~~~

Una chica con un vestido blanco hasta un poco arriba de las rodillas y de mangas que le llegaban a la mitad de los codos se encontraba atada con unas cadenas y grilletes, no pudo ver su rostro, pero por su voz supo que estaba desesperada.

???: ¡Sesshomaru! ¡Por favor no! ¡No hagas eso! ¡Por favor! ¡Recuerda! ¡Recuerda!

~~~~~~Fin de la alucinación~~~~~

Casi chocó contra otro vehículo, pero por fortuna freno a tiempo, aunque eso no quitó que el otro chófer le gritara un sin fin de ofensas que él se limitó a ignorar. De nuevo encendió el auto y se fue. Un sin fin de emociones lo inundaron ante lo que había visto, algo en esa mujer que le resultaba familiar, no supo que, pero iba a averiguarlo.

Sesshomaru: [ ¿Quien eres?]

La felicidad de hace unos momentos se había esfumado convirtiéndose en dudas. Maldijo casi todo el camino porque no podía dejar de pensar en lo que había visto.

CON RIN...

Se había quedado dormida después de llorar. Inuyasha llegó unos minutos más tarde un poco enfadado con Rin por no haberle avisado que ya se encontraba en casa, la había estado buscando por toda la escuela y por algunas tiendas cercanas que sabía siempre frecuentaba. Al final se decidió a ir a casa, algunos vecinos le confirmaron que la vieron llegar.

Inuyasha: me las va a pagar por hacer que me preocupará

Subió y tocó un par de veces la puerta sin tener respuesta.

Inuyasha: Rin se que estás ahí, abre la puerta

Espero a que ella le hiciera caso, pero nada.

Inuyasha: estoy hablando enserio Rin, abre la puerta

La castaña despertó, pero no sé movió de su lugar.

Rin: no estoy de ánimos Inuyasha, vete por favor. Quiero estar sola

Inuyasha: no hasta que me expliques porque te fuiste sin decirme nada

Rin: te lo explico después y podrás regañarme todo lo que desees, pero por favor déjame sola

Espero a que su hermano protestará de nuevo lo cual no ocurrió por lo que supuso que la había dejado en paz.

Rin: [No creo que le haga gracia lo que le cuente]

Sabía que si le contaba TODO a su hermano no me creería, pero de lo que si estaba segura era que le rompería la cara a Sesshomaru. Por otro lado, Inuyasha había ido a su habitación mientras se comenzaba a sacar el uniforme ser quedó pensativo con la actitud de su hermana.

Inuyasha: algo le está pasando su voz parecía apagada

Empezó a buscar razones por las que su pequeña hermana estaba así sin llegar a una idea clara. Quizás habría tenido problemas con Sango o algún compañero, tendría que preguntar o averiguarlo.

Inuyasha: lo que sea que le está pasando lo voy a descubrir...

*******

Las semanas pasaron y todo iba empeorando para Rin. Sesshomaru ya no le hablaba, siempre estaba con Sara y cada día le llevaba un detalle, era como si esa amistad que alguna vez habían formado se hubiera esfumado. Naraku seguía con el "plan" de unirlos, pero nunca lo consiguió, a lo mucho que llegó fue a hacer que simplemente se saludarán y ya. Inuyasha notaba cada vez a su hermana apagada y claro que también su madre lo noto, pero Rin nunca hablo con ellos.

******
2 meses después...

Sesshomaru cada vez estaba más dispuesto a pedirle a Sara que fueran novios, pero siempre había algo que se lo impedía y eso era culpa... ¿Culpa de que? No lo sabía, aunque eso no le evito seguir con ella. Y sobre la alucinación simplemente la dejo en el olvido.

Rin se había hecho menos social, casi siempre se la pasaba sumida en sus libros y en trabajar con su madre. Se alejó de Kohaku y Sango sin darse cuenta. Ellos intentaban sacarle una sonrisa, pero nunca lo consiguieron. Hubo una ocasión en la que Rin se fue de la florería dejando únicamente a su madre, la razón había sido que uno de los sirvientes de Sesshomaru había ido a recoger un arreglo de rosas las cuales formaban un corazón, lo peor era que ella había hecho ese ramo y le sería llevado a Sara.

Naraku observaba como poco a poco esa pareja se alejaba más y más, era doloroso ver había fallado a su palabra. Muchas veces tuvo la oportunidad de darle unos puñetazos a Sesshomaru, pero nunca lo hizo ya que siempre intervenían esas personas. Él ahora se encontraba observando a lo lejos a Rin, que regaba algunas flores con mucha delicadeza.

Naraku: [pobre de ti, antes y ahora sufres como nunca por el amor que le tuviste a ese príncipe despiadado ¿Hasta cuándo podré soportar ver cómo cada vez están lejos el uno del otro?. Está decidido, no me quedaré de brazos cruzados]

Vio a la castaña ir adentro y fue cuando decidió acercarse.

Naraku: [ya es hora de que conozcas la verdad...]

CONTINUARÁ...