Watashi no ōjo

El Veneno No Es Suficiente

A la mañana siguiente cuando despertó kurosake se dio cuenta de que kataline estaba en su cama dormida se exalto diciendo en voz baja. -¿Qué haces aquí kataline? –y somnolienta dijo estoy durmiendo en mi cama ¿Por qué? –como que porque. –Y en eso kataline se percató de lo que sucedía y dijo.- ¡Qué haces en mi cama ¡ -como que tu cama si estas en mi habitación. –he, y que hago aquí. –no lo sé cuando desperté estabas aquí. -kurosake ni siquiera la miraba a la cara por lo que pasó la noche pasada. –y en eso entra el rey Fausto y la reina con dos caballeros reales. –y en eso él se arrodillo y dijo. –no es lo que parece lo juro no se ni siquiera sé porque está aquí ¡lo juro!

Levántate kurosake no te preocupes. –Como que no me preocupe, esto es grave traicione su confianza. -dijo eufórico. –tranquilo yo la metí aquí en la noche, por algo que vi en la noche. –Le-le juro que ella me beso yo ni siquiera lo planee. –como que beso. –dijo kataline. –¡no importa ya lo hecho, hecho esta¡ Y en nuestra familia es tradición que la persona que tenga el primer beso del sucesor al trono se case con el mismo y que mas me haría feliz que seamos familia mi buen amigo kurosake. Por lo tanto dormirán juntos. –espera un momento ¿te parece bien que tu única hija duerma en la misma habitación, misma cama de un tipo que no llevas de conocer más de un mes? –el cual salvo su vida en repetidas veces. –Dijo el rey completando la frase, y kurosake sin nada que objetar –está bien si es tradición lo acepto pero pido tiempo para pensarlo con detenimiento y seriamente. –está bien dijeron los reyes y la princesa un poco deprimidos. –lo que me recuerda kataline ¿puedo hablar contigo un momento? – claro de que trata. –prefiero hablar de eso en un lugar más privado, afuera del castillo si te parece bien. – claro vamos. – ya afuera del castillo asegurándose de que nadie los escuché, sentándose y kurosake empieza a interrogarle. -¿Qué es lo último que recuerdas del día anterior?

–Pues recuerdo que un hombre con un corbatín raro me dio un vaso de jugo de uva, creo que el último que había y después todo se volvió borroso. - podrías definirme más específicamente como era ese señor de corbatín, si recuero que tenía un lunar en la barbilla y su corbatín era negro con puntos blancos. –bueno con eso es suficiente.

Bueno ahora iré a hablar con tu padre. – ¿Qué vas a hacer? –justicia. –ya llegado con el rey le pidió de favor que reuniera a todos sus sirvientes y caballeros que los caballeros sin armadura, A lo que el rey accedió confundido, ya todos reunidos en donde el rey los cito él dijo.-bien todo el mundo en esta ocasión kurosake Azuto les dará un mensaje importante y si tiene que hacer una orden la aran sin decir nada ¡entendido? –¡sii! –bien gracias a todos, primero ¿ya están todos aquí? si bueno comencemos cerrando bien todas las puertas... ok ya todo está cerrado así que les voy a pedir a todos los sirvientes que hagan una fila los caballeros sin armadura... bien los que tengan algún lunar en la barbilla les voy a pedir que se pongan de este lado y los que no se pongan del otro.

Ya terminado de hacer todo eso a los que tenían el lunar los puso afuera del comedor y metió a uno por uno y les dijo a todos que tomaran un sorbo de este baso del que tomo la princesa la noche anterior y todos accedieron y no pasó nada y los mando por otro lado y les pidió que ahí se quedaran y les dijo sobre todo y así hasta el último el cual parecía nervioso y le dijo que tomara todo el vaso sobrante de donde la princesa había tomado la noche pasada, y a lo cual se resistió diciendo. –tengo mucho trabajo. –y kurosake le explico lo que sucedió y le dijo que solo tenía que beber el vaso y podría irse. – Está bien me beberé en condenado vaso. – A lo cual cerró los ojos con fuerza y después de todo eso dijo. - no pasó nada. –que esperabas que sucediera y el sirviente dijo. - nada no pensé que pasaría nada, así que si me disculpas me tengo que ir tengo mucho trabajo. -así empezándose a ir y unos cuantos pasos antes de llegar a la puerta kurosake dijo. –detente . –lo que respondió el sirviente. – ¿o si no que?. –te heriré de gravedad y el rey me lo permitió así que no te recomiendo dar otro paso. – está bien. –al suelo con las manos en la cabeza. –a lo cual hizo y se le llevo a un tribunal para denominar el castigo correspondiente al acto.