I

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Hablan y discuten a la vez.


Su atención cae sobre ellos y no cabe duda, que tiene cosas más importantes de qué preocuparse.


Su inteligencia no puede ser desperdiciada en asuntos tan tonto como estos. De todos modos, le gusta ver a los novatos. Están perdidos y ni siquiera tienen idea de qué hacer. Son tan jóvenes y tan llenos de errores. Bueno, ya que. Tendrá que arreglarles la vida con una simple y estúpida solución


"¿Y si cambian el cartucho?"


Todo el mundo detiene su confusión mental y miran a esa criatura tan superior, hablándoles para entregarles la respuesta que necesitan.


"Oh, vamos, todos son inteligentes".


En realidad, ella no está hablando en serio.


Toma un sorbo de su café y miente a su gusto.


"No se dejen estresar por este tipo de cosas".


Seguramente creyeron, que nunca, en toda su vida, escucharían su voz. Y menos siendo agradable, Esa, es la mayor sorpresa. "Gracias Abogada."


"Un placer. Ahora regresen al trabajo".


Ver a tantas personas perdidas a la vez, es tan divertido; luego ser amable y ver sus rostros sorprendidos y agradecidos ... Es aún más gracioso.


Una vez, con su dosis diaria de ser la jefa de alguien, e ignorando, el hecho de que ella también tiene uno, se aleja del lugar, donde los internos no saben qué hacer con una simple impresora.


Se pregunta cómo en un futuro, esas mentes tan brillantes, lidiaran con los problemas que ella tiene actualmente.


¿Cómo harán para reemplazarla?


Al parecer, tendrá que seguir trabajando por un largo, largo tiempo.


Bueno, mientras ese día llega, tendrá que lidiar con esta persona, a quien intenta evitar a toda costa.


Para ella, la tristeza es contagiosa. Y este hombre, está llena de ello.


"¿Me necesita, señor?"


Ella siempre intenta ser amable para ser del agrado del hombre. Pero su vida parece seguir siendo triste y no hay nada que ella pueda hacer por él; más que ser una buena empleada.


"Estos documentos deben estar lo antes posible".


Ella lo nota; hay algo diferente en él. Tal vez tiene que ver con su hija. Y si tiene razón, eso es lo último que Clarke desea en este momento.


POR NOSOTRASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora