No es imposible, solo poco probable [YoonSeok]

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2.

Yoongi sostenía un paraguas en la mano, el corazón vuelto loco y lentes negros en su cara.

¿Por qué lentes negros?

No sabía, solo... en la mañana pensó que se vería genial con lentes negros, y por alguna razón sentía que necesitaba verse genial si hablaría con Jung Hoseok.

(Lo que menos se sentía ahora era genial).

¿Por qué estaba muerto de nervios?

Porque necesitaba hablar con Hoseok.

¿Y por qué tenia un paraguas en la mano?

Pues, luego de aquel sábado de lluvia, Yoongi se quedó con el objeto ya que Hoseok se lo prestó cuando su autobús llegó antes que el de Min.

Entonces, ahora el pálido muchacho caminaba por los pasillos de la escuela buscando el salón de Hoseok (con sus lentes negros puestos, claro) para poder entregarle su paraguas y poder salir por fin de aquel martirio que significaba saber que conocía a Hoseok y que aquello amenazaba su tranquila existencia en la escuela (que consistía en algo así como que nadie supiera que existía).

Cuando giró en un pasillo se encontró a quien buscaba en un casillero, y estaba listo para ir a él cuando vio que no estaba solo.

—Vamos, bebé, fue un error —decía Jiho, el novio de Hobi intentando abrazar la cintura del chico, que se encontraba cruzado de brazos, empujando con suavidad al chico con una mano cuando este se acercaba mucho.

—Estoy cansado de que siempre tengas errores, Jiho —respondió Hoseok con voz cansada.

Yoongi se sintió terriblemente incomodo al darse cuenta de la situación en la que estaba, casi parecería que estaba espiándoles y lo ultimo que quería hacer era seguir siendo el espectador del drama de aquella pareja.

Se dio la media vuelta, quizás luego buscaba a Hoseok, o mejor, desaparecía del país para así jamás volver a tener contacto con él.

Si, eso sonaba como una idea totalmente buena.

—Bebé, no te pongas...

—¿Yoongi?

Min se quedó parado, tieso. Vagamente pensó que, por Dios, Ho conocía su nombre.

(¡¿Como conocía su nombre?!).

—¿Quién es Yoongi? —Jiho preguntó con el ceño fruncido.

Si, ¿quien es Yoongi?, pensaba el mismo Yoongi, queriendo correr, pues Jiho, gigante y con cara de malo le miraba de una forma no muy agradable.

Pero, Hoseok sin tomar en cuenta a su novio, ni la cara asustada de Min se acercó, hasta quedar frente a él.

—¿Me lo venias a devolver? —preguntó con una sonrisa pequeña.

Yoongi pestañeó, miraba al menor que le observaba interrogante, luego desvió la mirada al novio del chico que no estaba para nada feliz.

Finalmente logró volver en sí, y con su cara colorada y en movimientos casi robóticos estiró el paraguas en su dirección.

—G-gracias por prestármelo —habló, maldiciéndose por tartamudear—, uhm...lo cuidé... bien.

¿Lo cuidé bien?, gimió en su mente.

—Lo puedo notar —Hoseok soltó una risita baja, dándole una bonita sonrisa donde mostraba sus frenillos de color amarillos—, gracias por cuidarlo bien, Yoongi —lo recibió, afirmándolo contra su pecho.

Min le observaba, algo cohibido por la sonrisa que le entregaba el muchacho, una tan linda que le hizo a él sonreír también.

—¿Por qué tenía eso él, Hoseok? —preguntó Jiho, volviendo a los dos muchachos a la realidad. El chico ya estaba muy fuera de lugar viendo como su novio (ignorándole) le hablaba a un muchacho menudo, paliducho, sin mucha gracia según él.

Yoon se removió incomodo y Hobi volvió a fruncir su ceño, ya que al parecer, para el si tenia gracia el chico.

—No es de tu incumbencia —le dijo al mayor.

—Es de mi incumbencia si un enano le está coqueteando a mi novio —respondió el mayor, mirando con seriedad a Jung, al cual se le abrieron los ojos de la sorpresa.

—Y-yo me voy... —con la voz débil Yoongi dio un paso atrás, sintiéndose muy avergonzado ya.

—No, espera Yoongi —Hoseok le detuvo, para luego girarse al basquetbolista—, Jiho —habló, con una voz bastante diplomática—, no es para nada de tu incumbencia con quien hable o no tu exnovio.

Y sin más, dándole una casta sonrisa se dio la media vuelta, afirmó con suavidad el brazo de Yoongi (pues no planeaba dejarle en manos de un bobo como Zico a solas), y así caminó con él por la escuela. Jung iba tranquilo, parecía ni notar las personas curiosas que les veían y murmuraban cosas.

Yoongi al contrario si lo notaba, y para partir no sabia que estaba pasando, solo sabía que Hobi mantenía sus manos en su brazo, y que, al parecer, presenció como terminó con su novio.

En un momento el chico a su lado dejó de caminar, parándose frente a un salón y soltándose del brazo de Min. Parecía estar debatiendo si hablar o no (algo que jamás creyó que le pasaba a Hoseok), pero, al final alzó su cabeza y le miró.

—Oye, disculpa porque tuvieses que ver eso, son... Ah, estupideces —negó con un suspiro, para luego darle una sonrisa—, pero gracias por devolvérmelo —alzó un poco el paraguas.

—De nada —Yoongi rascó su nuca con cierta vergüenza, haciendo a Hoseok sonreír un poco más.

—Bueno... Debo entrar a clases —dio un paso hacia atrás—, y...me gustan tus lentes —le sonrió con cierta vergüenza—, se ven genial...

Y tan perfecto como siempre, con sus mejillas sonrojadas mientras soltaba una risa baja se despidió con su mano entrando a su salón. 

Pasaron unos treinta segundos hasta que Yoongi volviese en si.

Dijo que mis lentes se ven genial...pensaba, al borde del colapso mental, quiero morir...