Fingiendo ser... ¿Novios? |Versión 2023

31| ¡Te odio! (reescrito)

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Enero está terminando.

Hace una semana que me reencontré en Central Park con Virginia después de recordar aquella canción que escribí. Como supuse, ella ya sabía lo que pasó aquella noche desde hace un año; lo cual me hace pensar que no sé me da bien disimular. Cuando Virginia iba a seguir hablando del tema, le suplique que no me apetecía recordar nada y, aunque estoy segura de que se quedó con las ganas de decirme algo importante, no insistió. En un principio iba a ser solo ese día de vernos, pero hemos acabado viéndonos más veces, —eso sí: mintiendo a Blake—.

Remuevo mis pensamientos y salgo del coche junto a Blake. De la mano, entramos al Crosswell.

Voy con un nudo en la garganta por si me encuentro a Logan y aunque intento disimular mis nervios, mi novio parece darse cuenta y en cuanto llegamos a mi taquilla, me pregunta:

—Hey, ¿estas bien? —Abro la taquilla, mirándole de reojo —Pareces nerviosa... —En ese momento, abre los ojos y me sujeta de los brazos. Parece asustado —¡No jodas, Pulgarcita! ¿Te está pasando lo mismo que en clase? Si quieres podemos ir a secretaria...

—Blake, tranquilo —le interrumpo.

Luego, le beso aguantando las ganas de reír por su cara.

A una parte de mí le encanta que se haya preocupado por si me pasaba algo y me demuestra que no dudaría en cuidarme. La otra... la otra parte se siente culpable por haberle mentido con respecto a los supuestos "mareos" y "ataques de ansiedad" que nunca he tenido y que me inventé cuando salí de clase al ver a Logan.

El timbre interrumpe lo que iba a decir. Blake gruñe y yo me río mientras nos dirigimos a la primera clase de la mañana: matemáticas. No obstante, en cuanto entro, mi mirada se va hacia la persona sentada al fondo de la clase: Logan. Me paralizo un segundo y luego, para que Blake no se dé cuenta, me siento corriendo en mi asiento.

Este detrás de mí como siempre.

Justo en ese momento entra Emily seguida del profesor. Suelto un suspiro de alivio cuando mi mejor amiga se sienta en su sitio a mi lado sin haberse dado cuenta de quien se encontraba en nuestra clase.

—Hermana, ¿vienes? —Levanto la cabeza y miro a Amanda.

Si, ahora nos ha dado por llamarnos así y aunque sigue extrañándome que nos llevemos bien, ya me voy acostumbrando.

Niego y al ver que frunce el ceño, le digo:

—Voy a esperar a Blake en el gimnasio.

—De acuerdo. Diviértete —Sale junto a Emily riéndose por lo último que ha soltado y yo ruedo los ojos.

Termino de recoger las cosas y voy directa hacia el gimnasio con una sonrisa, pues he de reconocer que durante todas las clases, he conseguido que Emily no se cruce con Logan en ningún momento. Ni yo. Pero la sonrisa me desaparece cuando al llegar al gimnasio, lo veo allí, jugando a lo que parece ser el baloncesto él solo. No me extraña, pues a Logan siempre le ha gustado el baloncesto, pero ¿a última hora?

Dejo de pensar en eso y me coloco lo más lejos posible de él, pues para mi mala suerte, nos encontramos solos en aquella sala, los demás estarán en los vestuarios. Rezo por no llamar su atención, pero no hay éxito; en cuanto se gira a ver quién ha entrado y veo su sonrisa al verme, me recorre un escalofrío.

Aun así, intento no hacerle caso hasta que salga Blake.

Mientras sigo esperando a que Blake salga del vestuario, o de donde quiera que esté, no puedo evitar sentirme insegura sabiendo que Logan está allí conmigo. Sigo escuchando el balón de baloncesto contra el suelo y cuando miro de reojo, de vez en cuando veo que me mira.