Capitulo 15.

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Es septiembre. Las clases han comenzado, veo a decenas de niños por la calle con mochilas y una sonrisa en la cara. Otros mas mayores no tan alegres por haber empezado el curso.

Llego a la tienda y entro en el vestuario, gracuas a dios todavia no he perdido el pase. Me pongo el uniforme , paso por auto y papeleria antes de llegar a la seccion de perfumeria donde trabajo. Antes estuve en papeleria colocando mochilas, cuadernos y toda clase de utensilios que cualquier crio necesite. Perdona las formas pero acabe harta de tanto niño revoloteando y pataleando por los pasillos porque su madre no queria comprarle unas pinturas y tanta niña repelente negociando con su padre si la mochila de carro de las Monster High seria su mochila para el proximo curso.

Perfumeria me gusta, del verbo "trabajo gustosamente en esto". Hasta sonrio a los clientes, no digo mas.

Se me pasan las horas volando, toca descanso asi que cojo el tabaco de mi taquilla y un bizcocho que me he traido. Salgo y me cruzo con Terrie,que va corriendo hacia el vestuario.

- ¡Te espero fuera!- le grito.

Terrie trabajaba en alimentacion hasta que le ofrecieron el trabajo de camarera en el bar que hay enfrente de las cajas donde se cobra. Es bastante amable. Lo que mas me gusta de ella es que no hace preguntas que, en mi situacion, son incomodas. Nunca me ha preguntado porque me mude ni cosas tan personales asi que es agradable pasar con ella los descansos. Ambas fumamos y fue asi como nos conocimos cuando yo empece a trabajar aqui.

- ¡Dame un trozo por favor! ¡Muero de hambre!

- ¿Has vuelto a olvidar traer algo de comer, no? -Le pregunto riendo.

- Si me preparaba algo llegaba tarde asi que he confiado en que tu me dieras un mordisco

No le dejo terminar la frase y le muerdo el hombro. Ambas reimos.

- ¡Un mordisco de tu almuerzo, tonta!. No me dejas terminar de hablar.

Le doy el trozo de bizcocho que me queda. Un par de calos al cigarro y me voy.

-Disfruta del trozo ¡Otro dia te dejare morir de hambre!-nos reimos.

La distancia no existe, son los padresWhere stories live. Discover now