Cap. 5 - Tentaciones

Începe de la început
                                    

—¡Zoé! —grita mamá desde el otro lado de la puerta — ¡Levántate o se te hará tarde!

Gruño obedeciéndola, entro al baño, lavo mi rostro para poder despertar completamente. Maldición, el desvelo hubiera valido la pena, pero no es así. Cepillo mis dientes rápidamente y me cambio de ropa.

Bajo las escaleras corriendo y en la mesa está mi papá, leyendo el periódico y con su típico café mañanero.

—¡Papi! —le digo abrazándolo por la espalda.

—Buenos días princesa.

—Esa frase me recuerda a mi libro favorito de Blue Jeans.

—Lo sé hija, por eso te lo digo.

Tomo asiento a un lado de él y luego llega mamá con mi desayuno. Se sienta frente a mí y yo, comienzo a comer preparándome mentalmente para que inicie su riña.

—Cielo, anoche nuestra niña vino a las dos de la mañana —anuncia tranquila.

Papá escupe un poco de café y empieza a toser, tanto mamá como yo no movemos un dedo para ayudarlo, cuando deja de ahogarse está completamente rojo. Sus ojos me inspeccionan lleno de molestia.

—¡¿Por qué llegaste tan tarde?! ¡¿Acaso tienes novio?! —pregunta horrorizado.

—No. Vine tarde por que estuve viendo películas con Bianca —explico con tranquilidad.

—¿Así? —mamá de cruza de brazos, una señal de que esta molesta —  Entonces explícanos porqué parecía que venias de atracar un banco —su vista viaja hacia papá —. Para tu información querido, nuestra hija estaba vestida completamente de negro, cuando tú y yo sabemos bien que Zoé odia ese color.

—Ya mamá —digo rendida —. No dice nada malo, ya te explique por que vestía de esa forma.

Me levanto de la silla causando un molesto sonido.

—¿No terminarás de desayunar? — pregunta papá preocupado.

Niego con la cabeza, tomo mi mochila y salgo de la casa. Sé que me comporto de manera infantil y aunque mamá tenga razón sus especulaciones son exageradas, pero no estaba haciendo nada malo, al menos eso es lo que creo.

Adam, como es de costumbre, me espera fuera. Solo que hay algo diferente en él, esta recostado en su auto y lo que me sorprendió es verlo fumando un cigarrillo. 

Su vestimenta consiste en unos jeans negros ceñidos, una camisa blanca combinada con una chaqueta de cuero negro.

Todo en él cambió. 

《Debe de estar pasando por un momento hormonal 

—¿Acaso actuarás en una obra? —pregunto divertida —¿Y por que el cigarrillo? Es de mañana, te apuesto a que no has desayunado.

Me observa y da una calada de una manera tan sexy, que logra erizarme la piel, su actitud me recuerda a chicos malos que he leído en libros. Tira el cigarrillo y saca el humo moviendo la cabeza de forma exagerada.

—Hola preciosa —sonríe coqueto.

—Ya dime, ¿Qué planeas?

—Sube al auto —manda.

Lo hago sin dudar. Y al ingresar al vehículo logro captar la esencia de su colonia, pero mi mente comienza a compararla con el aroma de Derek, y este no se le compara.

—¿Qué has pensado de lo que hablamos anoche? —dice mientras enciende el auto y comienza a conducir.

—No lo he pensado ya que hace unas horas me lo propusiste —digo con ironía.

No Te Metas Con ZoéUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum