Ellos y un piano: Pabliriam

CAPÍTULO 2: Te miro, me miras y el mundo se paraliza

A la mañana siguiente Miriam estaba con el resto de sus compañeros hablando de todo y de nada cuando Noemí les pidió que fuera a la sala de coreografía/bailes.

Llevaba desde la noche anterior sin dejar de pensar y tararear diferentes canciones de Pablo, su actuación la había removida por dentro. Viéndolo a él hacía que cualquier duda que tuviera referente a la música se disipara y quisiera seguir luchando por ello.

Roi a la guitarra y Alfred acompañando al piano, mataron el tiempo cantando todos canciones, entre las que varias eran de Pablo López.

Después de un rato sentados, Noemí apareció con un sonriente Pablo. Todos se levantaron y poco a poco el invitado fue saludando a todos los concursantes.

Noemí ya había desaparecido y él se sentó no sin antes tocar la espalda de Miriam, lo que hizo que ella sintiera un escalofrío y se sentara nerviosa.

Les preguntó por el contraste de estar dentro y luego fuera, ellos le hablaron sobre su escapada navideña y Miriam un poco nerviosa, tocándose la ceja le respondió enseguida. Luego le fueron diciendo de donde eran cada uno, ya que él iba a ir de gira por España pronto.

Pablo les estuvo hablando de su tiempo al salir de OT, la gente cercana a él y lo viejo que lo hacían sentir al tener 33 años ya, y Miriam no pudo evitar contar la diferencia de edad y pensar que parecía más joven para la edad que tenía.

Poco después llegaron Noemí y Manu lo que hizo que Pablo hablara de sus "trastadas" dentro de la academia; como su manía con la ventana de su cuarto.

Después de esto se dirigieron al piano y Pablo les habló sobre la primera canción escrita cuando llegó a Londres "El gato" para después hacer una demostración de magia y piano con su voz.

Todos lo miraron embobado y Miriam aprovechó para grabar y hacer varias fotos.

Cuando acabó todos pidieron más y Pablo por petición de Alfred volvió a tocar y cantar, pero esta vez la canción "Vi".

Después otro fuerte aplauso Pablo pidió a los chicos que le cantarán algo.

Agoney le comentó que eligió una de sus canciones para las pruebas de acceso e incluso instó a Miriam a cantar con él, pero ella nerviosa se negó. Mientras esta conversación ocurría Pablo los miraba ambos mientras se acomodaba enfrente de ellos.

Miriam se percató y le sonrió, haciendo que él, le devolviera la sonrisa.

-¡Camina!

No supo quién propuso la canción, pero de repente todos empezaron a cantar el himno de esa edición.

Noemí que se había ido volvió con unas camisetas que había traído Pablo con la imagen de la portada de su nuevo disco. Y después empezó a meterles prisa con las fotos.

Uno a uno fueron haciéndose fotos con él, hasta el turno de Miriam. Al principio se sintió nerviosa pero una vez abrazada a él, se sintió tan tranquila que le hubiera gustado estarse un rato más así.

Minutos más tarde Pablo ya había salido de la academia y Miriam pensaba si esa sensación de necesidad había sido imaginación suya o la falta de cariño, al estar lejos de sus seres queridos.

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Se despidió de todos y en especial de Manu, prometiendo verse pronto en el estudio del último. Un coche ya lo esperaba en la entrada.

- ¿Qué tal todo? -su amigo y mánager de toda la vida lo esperaba de copiloto.

-Nada mal. -dijo taciturno mientras se ponía la gorra que había llevado esa mañana puesta y las gafas de sol.