❥Dolor ╏Nathanette╏

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Marinette Dupain-Cheng, era una chica de 15 años que lo que más deseaba era una relación seria.

Las personas se acercaban a ella solo por ser la hija de los grandes empresarios de París, Tom y Sabine Dupain-Cheng.

Su mejor amiga, Alya Cesaire, estuvo buscando el hombre "perfecto" para que ella fuera feliz.

Después de clases, la morena agarro el brazo de su amiga antes de que se fuera.

— Marinette, tengo que decirte algo increíble.

— ¿No me lo puedes decir por mensaje? Carlos me está esperando.

— Tu chofer puede esperar— Agito su mano libre restándole importancia.

— De acuerdo, habla rápido— Se soltó de su agarre y se cruzó de brazos.

— Primero necesito preguntarte algo ¿Todavía quieres tener novio? — Ella asintió— Genial ¡Porque acabo de arreglarte una cita con Nathaniel!

La azabache dejo caer los brazos y abrió los ojos sorprendida.

Ella estaba locamente enamorada de Nathaniel Kurtzberg por su actitud tímida que le causaba ternura. Estaban en la misma clase, pero no se había animado a hablarle.

— ¡¿Cómo lo conseguiste?!

— Fácil, hable con él sobre la maravillosa persona que eres y acepto salir contigo. Bueno, para conocerse.

— ¡Eres la mejor amiga del mundo! — Se lanzó hacia ella que ambas cayeron al suelo riendo.

— De nada ¡Ahora quítate que pesas mucho!

— Lo siento— La azabache se levantó y la ayudo a pararse.

— Nathaniel te estará esperando a las tres en el parque. Así que iremos a tu casa y te pondrás más hermosa de lo que ya eres.

— ¡Ya vámonos! — La ojizarca agarró la mano de su amiga para arrastrarla fuera de la escuela en donde su chofer la estaba esperando.

Al llegar a la mansión Dupain-Cheng, ambas fueron recibidas por Tikki, la sirvienta.

— ¿Cómo le fue señorita? — Preguntó la pelirroja.

— Tikki... Y ate dije que no me llames así, solo dime Mari.

— Discúlpeme se... Mari, es la costumbre.

— No te preocupes.

— Hola Tikki, es un gusto verte— Saludó la morena.

— Hola Alya— Devolvió el saludo— El almuerzo estará listo en unos minutos ¿Comerá en su habitación?

— No, ahora bajo.

— ¿Te quedaras a almorzar Alya? — Preguntó ahora mirando a la de gafas.

— Gracias Tikki, pero ya quede con alguien.

— Bueno, avísenme si necesitan algo.

La azabache tomo la mano de la morena y la llevo a su habitación, una vez adentro se sentaron en la cama y la oji-azul miro a su amiga con recelo.

— ¿Qué es eso de que quedaste con alguien?

— Solo quede con Nino para almorzar, nada importante.

— ¿Nino? ¿No habían terminado?

— Si, pero solo saldremos como amigos.

— ¿Segura? Sé que fue difícil su separación y te costó mucho olvidarlo.

💋THANK U, NEXT💋 【MLB】✓TERMINADAWhere stories live. Discover now