Mi pecho sube y baja, la puerta luce más lejana. Estiro mi mano, pero no puedo tocarla. Mis piernas duelen, mi respiración se hace más pesada y hago hasta lo imposible por abrir la puerta.

No recuerdo tocarla, pero ya estoy del otro lado.

Todo está oscuro y frío. Me hace sentir pequeña y agitada.

Siempre odié la oscuridad, por eso busqué un lugar con buena iluminación. La oscuridad siempre me provocó ansiedad.

Tengo que despertar.

Cuando despierte
voy a estar sola.

Tengo que despertar.

Siento algo rozar mi pie y me muevo al instante. Mis sentidos se ponen aun más alertas. Puedo escuchar el sonido de algo ser arrastrado.

Tengo que despertar. Mi cuerpo pide a gritos salir de acá con cada una de mis fibras, pero soy incapaz de moverme.

Quiero despertar.

La imágen de una serpiente aparece frente a mi. Pierdo mi balance, pero aun así no caigo. Siento mi cuerpo helarse. Mi pulso se dispara y comienzo a sudar.

Necesito despertar.

Quiero despertar.

Los ojos de la serpiente son negros, no hay ni un atisbo de luz en ellos.

Quiero retroceder, pero no puedo. Solo puedo verla acercarse a mi. Quiero correr, pero mis piernas no reaccionan.

Quiero alejarme, pero ya es tarde, está demasiado cerca de mi cuello.

Grito con todas mis fuerzas, pero no emito ningún sonido. Intento moverme, pero solo me siento más presionada. Cierro mis ojos, esperando que pase lo que tenga que pasar, deseando que lo peor sea solo esto.

Y todo apunta a que sí, porque la serpiente comienza a recorrer mi cuerpo, causandome escalofríos a su paso. El sonido de roedores me hacen sentir aun más temerosa del entorno, sumándose a mi pesar.

Tengo que despertar.

No quiero estar sola.

Quiero despertar.

No quiero despertar sola.

Grito nuevamente,

nuevamente no hay sonido.

Una mano en mi espalda. Hay alguien tocando mi espalda, ¿eres tú, bailarina?

Despierto.


Poco a poco mis sentidos van regresando, calmando mi pecho y normalizando mi respiración.

El sonido de las aves,

la luz colándose por un costado,

la comodidad de mi almohada.

¿Cuándo se hizo mi almohada
tan cómoda?

Estiro mi brazo y me abrazo más a la almohada. Siento mi respiración chocar contra una superficie, pero no sé que es; solo sé que mi corazón también golpea fuerte sobre ésta.

Mi cuerpo aún tiene esa horrible sensación de desesperación y mis palmas se sienten heladas.

¿Cómo es que mi sueño favorito se convirtió en una pesadilla?

[Queen Of Hearts] [Lucas] [Nct]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora