Capítulo Treinta y Uno

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—Luego tendrás a los bebés de April también —dice Kaethennis y Ethan hace una mueca, es evidente que el asunto de los bebés de April le incomoda, incluso parece un poco infeliz respecto al tema.

— ¿Qué hay de ti Andrew? ¿Cuál sería tu deseo? —pregunta Dexter.

—Ser capaz de llevar felicidad a una persona que lo necesite mucho. Ya sabes, no solo ser parte de las personas que quieren hacer un cambio, quiero ser parte del cambio y lograr hacer sonreír a una persona que lo necesite.

—Que profundo —murmura Ethan—, creo que mi deseo sería quitarme ese peso de la culpa que siento cada vez que mi madre suelta el típico "estoy decepcionada de tus decisiones y elecciones, Ethan" realmente ese sería un buen deseo.

—No sé qué desearía, lo tengo todo —murmura Harry dándole biberón a Halle, todos rodamos nuestros ojos mientras Kae ríe y besa su mejilla.

—Por supuesto que tu darías una respuesta como esa, Harry —espeta Dexter—. Mi deseo sería poder robar a todos los niños de la banda y/o cercanos para criarlos antes de tener mis hijos propios.

—Tienes que estar bromeando —dice Kaethennis pegando a mi sobrino mucho más a su costado. Dexter ríe.

—Vale, solo bromeaba. Pero creo que mi jodido deseo sería darle en algún momento la misma oportunidad que me dio mamá a mí de tener una familia a un niño. Todos tenemos derecho a ser amados por una familia y me gustaría en algún momento hacerlo. ¿Qué? ¿Por qué me miran así?

—Bajo esa boca sucia, siempre has demostrado ser un hombre inteligente —le dice Andrew—. Ese es un buen deseo.

—Todos ustedes tienen buenos deseos —señala Kaethennis.

—Estos conciertos han sido... excelentes, pero he notado algo —comenta Harry—. Doug no se ha ido de desmadre con ustedes y Andrew ha creído conveniente besar a una entrevistadora en plena entrevista para hacerla sonrojar.

—Creo que la rubia está detrás de alguien y por eso esta tan tranquilo —apuesta Ethan. Doug rueda sus ojos.

—Solo estoy madurando —dice haciendo a todos reír, incluso él ríe—; todo a su tiempo.

—En mi defensa, solo quería que se callara. Ella estaba haciéndonos preguntas tontas —recuerda Andrew—, solo fue un beso de pico.

Todos reímos para continuar comiendo. El ultimo día en Francia.

***

18 de enero, 2013.

— ¡Hola, Hola España!—gritan Andrew y Ethan en español al mismo tiempo cuando comenzamos nuestro camino por el aeropuerto.

Por supuesto que todos gritan en respuesta. Oh Dios, hay un montón de fivers gritando, llorando y con esa mirada determinada de llegar hasta nosotros.

Creo que el constante ruido, los seguridad rodeándonos y unos leves empujones hacen que Halle comience a llorar realmente fuerte viendo a todos con horror. Harry frunce un poco el ceño cuando desesperado y asustado mi sobrino pide que lo alce, por supuesto que Harry lo hace. Mi sobrino se abraza con fuerza a su cuello mientras mira con horror a todas esas personas gritando.

—Calma, pedimos calma, hay niños —grita Pet intentando abrir camino junto a Hunter. Halle no deja de llorar aun cuando Kae la aprieta contra su pecho, está asustada, francamente, yo también lo estoy.

—Mierda, hay un montón de personas —dice Dexter impresionado.

Cuando pasamos por el camino que nos van abriendo, Doug y Andrew firman como pueden algunas de las cosas que le hacen llegar al igual que Ethan. Creo escuchar a Andrew quejarse cuando otra de sus gorras es tomada. Otra gorra menos para Andrew.

El Deseo Prohibido de Doug (BG.5 libro #2) Disponible en Librerías.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora