Otra vida.

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Los abrazos de mamá ya no se sienten tan cálidos como antes. Ni siquiera se sienten, porque no existen.
Las miradas cálidas tratando de llenarte de un poco de luz, de cariño, de esperanza se convirtieron en unas miradas llenas de desprecio, asco y lástima.
La pobre joven me extiende su mano, dice que la siga, que más allá del bosque hay un lugar mejor, donde todos los abrazos son cálidos y te recuerdan a las personas que extrañas, y dónde nadie te mira por ser diferente.
"Has perdido amor, te sientes sola" murmura mientras seca las lagrimas que recorren mi mejilla.
"Acompáñame y todo estará mejor"
Perdón, pero es la única solución que encuentro en este momento oscuro. Mi única salida.
La última oportunidad de ser feliz.
En otra vida volveré.

Léeme.Where stories live. Discover now